El Defensor del Pueblo llegó a Israel el pasado domingo para pronunciar dos conferencias en las Universidades Hebrea de Jerusalén y Tel Aviv, esta última sobre la «Transición española».
«Creo que el acuerdo (entre los dos pueblos) para crear un Estado Palestino independiente es inevitable, pero mientras tanto Israel debe defender a sus ciudadanos», puntualizó con referencia a los atentados suicidas en ciudades israelíes.
Y es que para el político socialista, la actual Intifada se diferencia de la primera (1987-1993) en que aquella fue «de carácter espontáneo, la de las piedras», mientras que la actual «está dirigida, impulsada, animada y sostenida por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y por los islamismos radicales fanáticos».
En la Intifada de Al-Aksa han muerto hasta ahora más de 2.700 palestinos y 900 israelíes, mientras que los heridos se cuentan ya por decenas de miles entre los primeros y por miles los segundos.
Enrique Múgica se entrevistó ayer en Jerusalén con el ex primer ministro laborista Simón Peres, y cenó con su amigo Samuel Hadas, que fuera el primer embajador de Israel en España.
Conocedor del conflicto árabe-israelí desde sus albores, responsabiliza personalmente a Arafat de lanzar la Intifada y consideró que «no es un líder» sino «un político miedoso», porque no se aceptó las ofertas de paz de Israel en Camp David (2000) ni en Taba, (enero 2001).
Consultado sobre el impacto devastador de la cerca-muro sobre la población palestina, recordó a Israel que como país ocupante «tiene también la obligación de preocuparse por su bienestar», si bien se niega a calificar de «muro» la barrera de separación o compararla con el histórico muro de Berlín.
«El muro de cemento, de ocho metros de alto, es sólo un 3,8 por ciento del total (de 730 kilómetros). La mayor parte es una valla con dispositivos electrónicos y cada tres kilómetros hay accesos, lo que no se puede comparar con el de Berlín», sostuvo el Defensor del Pueblo de España.
«Para los palestinos -manifestó el Defensor del Pueblo-, línea verde, azul o amarilla, la valla será siempre ilegal. Porque el (verdadero) problema es la causa, el terrorismo».
Y por ello, Múgica exhorta a los jueces de la Corte de La Haya a que, en su recomendación a la Asamblea General de la ONU, tengan en cuenta a las dos partes.
Pues -según dijo- «(No veo impedimento) para exigir a Israel que retire la valla, pero previamente, a los palestinos, les debe ordenar que retiren la causa de la valla, que es el terrorismo».
La visita de Múgica a Israel ha coincidido con la de un grupo de 80 miembros de la Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género, como Mónica Randall, Silvia Abascal o Cristina del Valle, ha realizado esta semana a Cisjordania bajo el lema de «Por la Paz en Palestina», que fueron recibidas por Arafat en Ramala.
El Defensor del Pueblo se refirió a la «unilateralidad» de la Plataforma, en referencia a que con sus severas condenas de Israel y a la barrera de separación en Cisjordania, no recordaron en ningún momento, ni visitaron, a las víctimas israelíes del conflicto.
«No pida usted peras al olmo. Como son antisemitas no van a visitarlas. Son grupos muy minoritarios y antisemitas que van a visitar a los suyos, no a las víctimas del terrorismo palestino».
concluyó. EFE el-cps/jal
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