Un asesor de Netanyahu, que encabeza el Partido Likud, indicó que si bien el líder se había acercado a un acuerdo con 61 de los 120 miembros del Parlamento israelí, el viernes pediría a Peres 14 días más "porque quiere construir una coalición tan amplia como sea posible".
El líder del partido laborista, el ministro saliente de Defensa Ehud Barak, un ex oficial militar, ha dicho que pedirá a la dirección de su partido un mandato para unirse al Gobierno de Netanyahu. Se espera que la semana que viene se vote la moción.
Unirse a la coalición de Netanyahu podría rescatar al Partido Laborista de la oscuridad política.
Los laboristas, que una vez fueron el partido dominante de Israel, quedaron en cuarto lugar en las elecciones de febrero, consiguiendo sólo 13 escaños.
El Likud obtuvo 27 escaños y el partido de centro Kadima, de la ministra saliente de Relaciones Exteriores Tzipi Livni, logró 28 asientos, mientras que el ultraderechista Yisrael Beitenu recibió 15.