Agencia AJN.- Una delegación de las Fuerzas de Defensa de Israell encabezada por el comandante de la Fuerza Aérea, mayor general Amikam Norkin, partirá esta mañana hacia Moscú después del incidente en el que el Ejército sirio derribó un avión de combate ruso, durante un ataque israelí en Latakia. Según informó en un comunicado el portavoz del Ejército, el comandante de la Fuerza Aérea y una delegación de militares presentarán un informe de situación posterior a lo sucedido, la información previa y todos los detalles de la investigación realizada por Israel tras el incidente.
También se informó que el Mayor General Norkin y la delegación “presentarán un informe sobre la continuidad de los intentos iraníes de transferir armas estratégicas a Hezbollah y establecerse en Siria”.
En la delegación se encuentra también el titular de la División de Relaciones Exteriores de las FDI, Brigadier general Erez Meisel, así como otros oficiales de Inteligencia, Fuerza Aérea y otros.
Mientras tanto, el presidente sirio Bashar al Assad envió sus condolencias al presidente ruso Vladimir Putin por la muerte de los ocupantes del avión. “Este desafortunado suceso es el resultado de la arrogancia israelí, que siempre usa los métodos más desagradables para lograr sus objetivos y llevar a cabo su agresión en la región”, escribió Assad.
En las primeras horas posteriores al ataque, en Jerusalem había serias sospechas de que la furia que generó el incidente y las fuertes reacciones rusas derivarían en una inequívoca exigencia rusa a Israel de detener todos los ataques en territorio sirio. El reclamo oficial del Kremlin, que se manifestó en un llamado “al lado israelí a evitar incidentes de este tipo en el futuro”, no está del todo claro, pero indudablemente requerirá que Israel sea extremadamente cauteloso en futuros ataques.