El Baz y Burns son los dos primeros emisarios de una ofensiva diplomática internacional prevista para este fin de semana y principios de la que viene y que incluye también las visitas del director de la CIA, George Tenet, y del alto representante de Política Exterior y Seguridad de la UE, Javier Solana.
Todos ellos buscan una fórmula que permita sacar a israelíes y palestinos del círculo vicioso de la violencia, y que satisfaga por un lado las demandas de seguridad de Israel y, por el otro, las aspiraciones políticas de los palestinos.
Sharón se niega a avanzar en las cuestiones políticas mientras no cesen los atentados contra Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) no efectúe una serie de reformas en sus organismos de seguridad y en las instituciones que controlan sus recursos financieros.
Fuentes estadounidenses reconocieron ayer que Washington está bajo intensas presiones por parte del mundo árabe para proveer a los palestinos un «horizonte político» que justifique el cese de la violencia.
Se cree que Burns expone hoy esa exigencia en sus entrevistas con Sharón y con el ministro israelí de Asuntos Exteriores, Simón Peres, a quienes pedirá un calendario para salir de la crisis no sólo en cuestiones de seguridad sino también políticas.
En su entrevista ayer en Ramala con Arafat, Burns explicó que EEUU concibe tres «canales» paralelos para rescatar el proceso de paz, según dijo el negociador jefe palestino Saeb Erekat, también ministro de Gobernación Local.
El primero de ellos, el canal político, tendrá por objeto la consecución de un proceso negociador cuyo objetivo final será la creación de un Estado palestino independiente.
El segundo consiste en una serie de reformas institucionales dentro de la ANP, aparentemente con el doble objetivo de satisfacer las exigencias israelíes y preparar a los palestinos hacia la autodeterminación.
El tercer canal es la búsqueda de una solución a los problemas de seguridad para ambos pueblos y que Burns dejará en manos de Tenet, quien llegará este fin de semana a la zona para apuntalar las iniciativas diplomáticas.
EEUU sostiene que los tres canales deben ser paralelos y que la búsqueda de un horizonte político no debe esperar ni a las reformas ni al cese de la violencia.
No obstante, Burns dijo ayer a Arafat que la creación de un Estado palestino sólo será posible después de que la ANP concluya las reformas institucionales y esté en condiciones de garantizar la seguridad de Israel.
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