Inicio ISRAEL Polémica en Israel por controvertidas declaraciones del rabino jefe contra los inmigrantes de la ex Unión Soviética

Polémica en Israel por controvertidas declaraciones del rabino jefe contra los inmigrantes de la ex Unión Soviética

Por Gustavo Beron
0 Comentarios

Itongadol.- El rabino jefe de Israel Yitzhak Yosef quedó en el medio de una polémica y fue duramente cuestionado por un importante sector de la dirigencia política luego de que se difundieran imágenes con fuertes cuestionamientos a los inmigrantes de la ex Unión Soviética.

Yitzhak Yosef lanzó su ataque en una conferencia rabínica celebrada en Jerusalem la semana pasada, donde criticó la Ley de Retorno, que hace que millones de no judíos, según la halajá, accedan a la ciudadanía israelí sólo por ser descendientes de judíos.

«Decenas o cientos de miles que no son judíos vinieron al país debido a la ley que determina quién es judío», dijo el rabino Yosef. «Hay muchos, algunos son comunistas, hostiles a la religión, que odian la religión. Ni siquiera son judíos», insistió.

El rabino sefardí acusó a los miembros de la comunidad de habla rusa de votar por partidos políticos que «incitan contra los ultra ortodoxos y la religión».

Yosef también cargó contra el Estado por invitar «deliberadamente a inmigrantes de la antigua Unión Soviética al país en un esfuerzo por debilitar el poder político del público ultraortodoxo». «Los trajeron aquí como palanca contra los ultraortodoxos», dijo el rabino jefe.

Yosef habló frente a los rabinos antes de su partida a las comunidades judías en la Diáspora y les aconsejó que no se involucraran en la conversión del extranjero debido a la complejidad y la sensibilidad halájica del tema.

Luego atacó a otros rabinos que, en su opinión, son demasiado indulgentes en cuanto a los requisitos para la conversión al judaísmo, y llamó a cuestionar la fe de aquellos que se convirtieron en los tribunales rabínicos estatales, que son supervisados ​​por el propio Yosef.

Uno de los rabinos criticados por Yosef en su discurso es un ex miembro del partido ultra ortodoxo Shas, el rabino Haim Amsalem, que condenó las declaraciones del rabino jefe.

«Es una tragedia que en la cima de la pirámide rabínica en Israel se sienta un rabino que no conoce su lugar. Todo lo que hace es calumniar y herir a cualquiera que se le ocurra con el pretexto de lo sagrado», dijo Amsalem.

«Cree que comprará su lugar entre la élite rabínica al difamar y luchar contra la conversión indulgente que une a las personas, pero sus palabras muestran una y otra vez su falta de comprensión en las reglas de conversión», añadió.

Lo cierto es que la polémica traspaso los límites del terreno religioso y el primer ministro Benjamin Netanyahu también denunció las declaraciones de Yosef y calificó la aliá de los estados postsoviéticos como «una gran bendición para el Estado de Israel y el pueblo judío».

«Esta es una declaración escandalosa que no tiene cabida en el discurso», dijo Netanyahu. «Mi gobierno continuará facilitando la inmigración y la integración en el país de nuestros hermanos y hermanas de la antigua Unión Soviética». avisó.

El presidente de la Knesset, Yuli Edelstein, quien emigró de Ucrania en 1987, también condenó las declaraciones de Yosef y calificó la inmigración de la ex URSS como «parte integral de la sociedad israelí».

«Cumplimos nuestro sueño de regresar a Sión y es imposible imaginar al Estado de Israel sin las mayores contribuciones de la inmigración soviética», sostuvo. «Incluso durante la campaña electoral no hay lugar para ese discurso inválido de odio y división». remarcó.

Otro legislador entre los críticos del rabino fue el presidente de Israel Beitenu, Avigdor Liberman, quien emigró de Moldavia y cuyo partido atiende principalmente a la comunidad de habla rusa de Israel. Calificó las declaraciones de Yosef como «racistas y francamente antisemitas».

«Esto no debe tolerarse», aseveró Liberman. «Exigimos la suspensión inmediata de (Yosef) del cargo y haremos campaña para elegir a un rabino jefe del sionismo religioso, que sabrá contener y abrazar, y no separar y dividir», remarcó.

«Hace solo unos días, el rabino jefe de Israel se burló del público secular, aconsejándoles que fueran a Ashdod (una ciudad con una gran comunidad de habla rusa) y coman carne de cerdo y hoy incita contra el público de habla rusa, que trabaja, sirve en el ejército en el servicio regular y como reservas, paga impuestos y contribuye al bienestar del Estado», manifestó.

Liberman luego pidió a los líderes de otros partidos que condenen enérgicamente las declaraciones de Yosef para evitar «un golpe crítico al delicado tejido de la sociedad israelí».

También te puede interesar

Este sitio utiliza cookies para mejorar la experiencia de usuario. Aceptar Ver más