Itongadol.- El principal dato que se destaca es que en una sola ciudad el aumento fue del 86 por ciento.
Más de 11,000 parejas terminan formalmente sus matrimonios. Las estadísticas no cubren los divorcios para no judíos o ciudadanos judíos que se engancharon en ceremonias civiles en el extranjero.
La tasa de divorcios entre los judíos israelíes aumentó un cinco por ciento en 2018, con un poco más de 11,000 parejas que se divorciaron, según las estadísticas publicadas el martes por el principal rabinato.
Las estadísticas de divorcio, con la excepción de 2017, llevan una tendencia ascendente en los últimos cinco años, según los datos. En 2018, 11,145 parejas se divorciaron a través de los tribunales religiosos judíos, en comparación con 10,661 en 2017.
Debido a que el rabinato supervisa el matrimonio de los ciudadanos judíos que realizan bodas ortodoxas, las estadísticas no cubren los divorcios para los no judíos en Israel o los ciudadanos judíos que se casaron en ceremonias civiles en el extranjero.
Según las cifras, el mayor aumento porcentual en parejas que se divorciaron se observó en la ciudad central de Gedera, que registró un alza de 86 por ciento en el número de parejas que se divorciaron: 28 parejas se divorciaron en 2017 en comparación con 52 en 2018.
Según las cifras, hubo un aumento del 16 por ciento en la tasa de divorcio en Tel Aviv en comparación con 2017, y una disminución del 7 por ciento en Jerusalem.
Las estadísticas del rabinato mostraron que 149 mujeres cuyos esposos se habían negado a concederles el divorcio y desaparecieron en Israel o en el extranjero finalmente recibieron la documentación que les permitía volver a casarse.
Bajo la ley judía, solo el esposo puede disolver un matrimonio. En Israel todos los divorcios están sujetos a la ley religiosa y esa norma dejó a cientos de mujeres en un problema legal por los esposos que se niegan a conceder divorcios.