Itongadol/AJN.- La jefa del departamento de epidemiología del Ministerio de Salud de Israel, Liora Valinsky, presentó hoy su renuncia por escrito a la jefa de Servicios de Salud Pública, Sharon Alray-Price.
En su carta de renuncia, que fue publicada por el Canal 12 de la televisión israelí, Valinsky expresa duras críticas a la forma en que el gobierno manejó los aspectos de la epidemia de coronavirus que estaban dentro de su ámbito.
“El departamento de epidemiología tuvo su autoridad y deberes transferidos al Comando del Frente Interno”, señaló, “pero desafortunadamente, no dedicaron el tiempo necesario para comprender las fortalezas y debilidades del departamento, y también se negaron a prestar atención a las asesoramiento de los profesionales del Ministerio de Salud cuando podrían haber obtenido sus conocimientos y experiencia”.
“De la noche a la mañana, los oficiales del ejército se convirtieron repentinamente en expertos indiscutibles en investigación epidemiológica, sin que tuvieran ningún conocimiento previo o formación profesional”, continuó. “Traté con todas mis fuerzas de alterar ciertas decisiones que, en mi opinión, se tomaron sin haber sido bien pensadas y sin considerar sus consecuencias. Sin embargo, no tuve éxito, ya que la autoridad para tomar tales decisiones se había transferido en su totalidad a alguien sin experiencia en el campo de la epidemiología o la investigación médica”, alegó.
“Ya estamos viendo los resultados de algunas de estas decisiones mal tomadas”, agregó. “El departamento de investigaciones no se dirige de forma profesional y no está teniendo éxito. Se ha ordenado a miles de personas que entren en cuarentena cuando no se les debería haber pedido que lo hicieran, y hemos visto un número sin precedentes de personas apelando estas órdenes. Lo peor de todo es la confusión que reina en todas partes”.
“Durante todo el período de la epidemia, invertí todo lo que tenía para lidiar con esta situación desafiante, trabajando día y noche, durante los fines de semana y festividades, y nunca me quejé ni una sola vez del costo físico y emocional. Hice todo lo que pude para ayudar al Comando del Frente Interno en su nuevo rol, incluso cuando no estaba de acuerdo con su enfoque”, destacó.
“Dejo mi cargo con el corazón apesadumbrado”, concluyó, “pero aun así, dejo atrás un plantel de enfermeras profesionales que seguirán haciendo su trabajo con dedicación. Solo espero que el Ministerio de Salud sepa apreciarlos adecuadamente”.