Itongadol/Agencia AJN.- “Las autoridades del gobierno israelí no quieren imponer un cierre del país, pero si la situación lo requiere, podría decidirse antes de fines de agosto”, afirmó hoy el director general del Ministerio de Salud, Nachman Ash, luego de que Israel registrara más de 3.000 casos de coronavirus por tercer día consecutivo.
En una entrevista con la radio del ejército, se le preguntó a Ash sobre una propuesta para tomar la decisión en las próximas dos semanas, como sugirió el ministro de Construcción y Vivienda, Ze’ev Elkin, durante la última reunión del gabinete del coronavirus. Ash afirmó que no está a favor de avanzar demasiado en un paso tan dramático, sino que evaluará el número de pacientes graves y los efectos de la campaña de vacunación de una tercera dosis para los mayores de 60 años en las próximas dos semanas.
“No queremos llegar a un cierre, pero la realidad podría convertirlo en un paso necesario”, señaló. “Hemos iniciado una tercera campaña de vacunación para reducir la morbilidad grave, y si vemos una disminución, podría prevenir, o retrasar, pasos más difíciles”.
Sin embargo, Ash también dijo que si no se registra ninguna mejora, podría producirse un cierre incluso antes de finales de agosto.
En las últimas 24 horas se registraron unos 3.421 casos nuevos de coronavirus, informó el Ministerio de Salud.
El número de pacientes graves se situó en 241, cinco más que el día anterior y casi 90 más que siete días antes. Los expertos temen que si la morbilidad grave continúa creciendo a un ritmo similar, para fin de mes Israel podría tener hasta 1.600 pacientes graves, abrumando el sistema de salud.
La esperanza es que la tercera inyección a las personas mayores de 60 años, que representan la mayoría de los pacientes graves, cambie la tendencia.
La respuesta a la nueva campaña de vacunación hasta ahora ha sido positiva, con unas 263.000 personas ya inyectadas de una población total de alrededor de 1,6 millones.
“En las próximas dos o tres semanas, los mayores de 60 años que aún no han sido vacunados tienen un riesgo seis veces mayor que los que se vacunan por tercera vez después de cinco días desde su tercera inoculación”, dijo el primer ministro Naftali Bennett hoy, pidiendo a la población que vaya a vacunarse, pero también que tome todas las precauciones antes de que comience la nueva inmunización.