Itongadol/AJN.- El presidente estadounidense, Joe Biden, afirmó el domingo al primer ministro Benjamín Netanyahu que Israel no debería seguir adelante con una operación militar en la ciudad fronteriza de Rafah, densamente poblada en Gaza, sin un plan “creíble” para proteger a los civiles.
La llamada duró unos 45 minutos, según un funcionario de la Casa Blanca.
Fue la primera conversación entre los dos líderes desde que Biden dijo el jueves que la respuesta de Israel a Gaza fue “exagerada”. También se produjo cuando funcionarios egipcios y un diplomático occidental dijeron que Egipto amenazó con suspender su tratado de paz con Israel si envía tropas a Rafah, donde El Cairo teme que los combates puedan forzar el cierre de la principal ruta de suministro de ayuda del territorio controlado por Hamás.
La amenaza de suspender los Acuerdos de Camp David, piedra angular de la estabilidad regional durante casi medio siglo, se produjo después de que Netanyahu dijera que enviar tropas a Rafah era necesario para ganar la guerra contra Hamás y señaló que el grupo palestino todavía tiene cuatro batallones allí.
Más de la mitad de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han huido a Rafah para escapar de los combates en otras zonas, hacinados en extensos campamentos de tiendas de campaña y refugios gestionados por las Naciones Unidas cerca de la frontera. Egipto teme una afluencia masiva de cientos de miles de refugiados palestinos a quienes tal vez nunca se les permita regresar.
Netanyahu, en una entrevista de NBC transmitida el domingo, insistió en que la operación de Rafah seguiría adelante “al tiempo que proporcionaría un paso seguro a la población civil para que pueda irse”.
Cuando se le preguntó adónde se suponía que debía ir la población, Netanyahu dijo: “A las áreas que hemos despejado al norte de Rafah, hay muchas áreas allí. Pero estamos elaborando un plan detallado”.