Itongadol.- En un lenguaje contundente, el gobierno de Biden se dispone a acusar al gobierno ruso de antisemitismo y de explotar el sufrimiento de los judíos al afirmar que su guerra contra Ucrania es una operación de «desnazificación».
«Para servir a sus fines depredadores, el Kremlin está explotando el sufrimiento y el sacrificio de todos los que vivieron la Segunda Guerra Mundial y sobrevivieron al Holocausto», dice el Departamento de Estado de EE.UU. en un dossier que se publicará hoy en su página web. «En el proceso, el Kremlin está restando importancia a los esfuerzos globales para combatir el antisemitismo y, en cambio, está propagando una de las formas más insidiosas del antisemitismo, la distorsión del Holocausto».
El dossier, obtenido con antelación por la Agencia Telegráfica Judía, aparecerá en una página dedicada a exponer la desinformación rusa en su guerra contra Ucrania, «Disarming Disinformation».
La página está programada antes de una sesión informal del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que Rusia ha convocado para reforzar su reivindicación de la desnazificación. La agencia de noticias rusa Tass citó el viernes a Dmitry Polyansky, enviado adjunto de Rusia ante las Naciones Unidas, diciendo que la sesión será «nuestra respuesta a los colegas occidentales, que expresan dudas sobre uno de los principales objetivos de nuestra operación militar especial en Ucrania, a saber, la desnazificación, y afirman que estamos exagerando el problema».
El dossier del Departamento de Estado cita a historiadores e instituciones que recuerdan el Holocausto, como Yad Vashem, el memorial del Holocausto de Israel, y el Museo Conmemorativo del Holocausto de Estados Unidos, que denuncian las afirmaciones de desnazificación como falsas.
El documento de tres páginas destaca que el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, es judío y perdió a su familia en el Holocausto. Incluye una foto de Zelensky con kipá, rodeado de judíos ortodoxos, en el Muro de las Lamentaciones de Jerusalén durante una visita en 2020.
«El Kremlin afirma falsamente que los peores nazis eran en realidad judíos, y trata de restar importancia al papel del antisemitismo en la ideología nazi», dice el dossier.
El documento se refiere a la afirmación ampliamente desacreditada del Ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergey Lavrov, de mayo, de que los judíos sostienen que «los mayores antisemitas son los propios judíos». Cita a funcionarios israelíes que condenan la declaración de Lavrov.
El documento concluye diciendo que Rusia está perjudicando la lucha contra el antisemitismo. «Con el aumento del antisemitismo en todo el mundo, es imperativo que todos denuncien este tipo de desinformación rusa particularmente perniciosa», dice.