Itongadol.- El 12 de noviembre de 1938 fue un día decisivo para el destino de los judíos de la Alemania Nazi. En esta fecha, aproximadamente 48 horas después de finalizada la Kristallnacht (Noche de los Cristales Rotos), cuando las comunidades judías fueron atacadas, miles de negocios judíos fueron saqueados y casi todas las sinagogas del país fueron destruidas, Marchal Hermann Goering convocó a una reunión para discutir los próximos pasos.
Para fines de ese año los judíos ya habían sido golpeados en la mayor parte de la sociedad alemana: se les había quitado su ciudadanía y se les había prohibido trabajar en el servicio civil, estudiar o enseñar en universidades y casarse con alemanes racialmente puros.
Goering, que era comandante de la fuerza aérea y ministro con responsabilidades en muchos aspectos de la sociedad alemana, vio a la Kristallnacht como innecesariamente destructiva. Su preocupación no era por el bienestar de los judíos sino por el hecho de que muchas propiedades y negocios habían sido destrozadas cuando podrían haber sido expropiadas.
El encuentro del 12 de noviembre contó con la presencia de 100 funcionarios del partido nazi y el objetivo era determinar los medios para lograr el pedido de Adolf Hitler de que el “asunto de los judíos sea coordinado y resuelto de una manera u otra de una vez por todas”. Allí se emitió el Decreto de Eliminación de los Judíos de la Vida Económica, que les prohibía trabajar en negocios, servicios o cualquier tipo de comercio, o pertenecer a asociaciones cooperativas.
En las semanas que siguieron se tomaron otras medidas: los niños judíos que iban a colegios alemanes fueron expulsados, los judíos no podían entrar al teatro o eventos culturales, y tampoco podían tener licencia de conducir, informó el medio israelí Haaretz.