Itongadol.- El representante de Keren Hayesod en Argentina, Marcelo Bancic, mantuvo una entrevista con ItonGadol a seis meses del inicio de la guerra de Israel contra Hamás y destacó el gran trabajo que realizó la institución desde entonces y todo lo que queda por hacer en 2024. “Para este año el objetivo va a estar puesta la reconstrucción del Sur del país y la resiliencia nacional”, destacó.
-¿Cómo fue el período desde el comienzo a la guerra hasta fin de año y qué es lo que crees que va a ocurrir en 2024?
-A partir del 7 de octubre y hasta el fin del año pasado, en todo lo que fue la campaña de emergencia, hubo un compromiso muy grande de la comunidad argentina y se logró duplicar la campaña. Salimos a buscar nuevos contribuyentes y algo que siempre pasa, pero yo creo que es muy importante también resaltarlo, es que los propios contribuyentes del Keren Hayesod, duplicaron sus contribuciones. Entendieron que lo que pasó el fatídico 7 de octubre implica una lucha por la existencia del Estado de Israel y el apoyo otorgado fue más grande, Israel nos necesita.
-Gracias al Keren Hayesod visité la mesa de emergencia del Fondo de Víctimas del Terrorismo, dentro de la Agencia Judía. Yael Raz responsable de esta área destacó que “esto todavía no empezó”.
-De toda la recaudación de la campaña de emergencia de Argentina, más del 60% se asignó para el Fondo de Víctimas del Terrorismo. Es un organismo que acompaña a los ciudadanos civiles afectados por el terrorismo, heridos, familiares de asesinados, evacuados y familiares de secuestrados. Es una ayuda que se da en las primeras 48 horas. Una ayuda con dinero en efectivo, más de 1000 dólares por persona, dinero en mano que se entrega sin hacer ninguna pregunta, sin burocracia. Este tipo de ayuda la seguimos proporcionando a los casos más afectados, a quienes más nos necesitan, ellos reciben hasta 10.000 dólares de ayuda. Obviamente que el gobierno de Israel también los ayuda, esta es su obligación, pero nosotros estamos ahí para dar una primera asistencia sin burocracia. Desde el 7 de octubre y hasta fines del 2023 el Fondo ayudó a más de 9000 víctimas del terrorismo con un total de aproximadamente 30 millones de dólares. Este 2024 estimamos que necesitaremos otorgar más de 18500 subvenciones inmediatas y de rehabilitación.
-¿El 2024 coincide con la idea de “esto recién empieza” para Keren Hayesod – CUJA?
-Pasó lo que pasó el 7 de octubre. De una campaña de emergencia pasamos en el 2024 a la campaña de reconstrucción y resiliencia. Y ni hablar de lo que nos está pasando en el norte, con Hezbollah. que no es Hamás; su alcance es mayor y mucho más dañino. Por eso para 2024 estamos trabajando en la reconstrucción y resiliencia. Pero teniendo en cuenta que en cualquier momento tendremos otra campaña de emergencia, otra guerra en el norte y es totalmente diferente a la de Hamás. Por eso uno de los objetivos de Israel es terminar lo antes posible, que devuelvan a los secuestrados y terminar con Hamás, porque de acá a dos o tres meses, podría haber una guerra en el norte con Hezbollah, que es una guerra directamente con Irán.
-¿Cómo se empalma esto con el 2024 concreto de Keren Hayesod-CUJA acá en Argentina?
-El 2024 es tiempo de reconstrucción del Sur y de ayuda para la resiliencia nacional. Son cuatro los pilares la reconstrucción y resiliencia. Nuestro socio natural, es La Agencia Judía, y el proyecto que tenemos es adoptar a diez comunidades del sur de Israel, que fueron afectadas. Eso significa empezar a ayudarlas en la reconstrucción. No vamos a construir las casas, de eso se tiene que encargar el gobierno, nos enfocaremos en ayudar en el área de educación y seguridad que también se hizo antes del 7 de octubre. La idea no es que la comunidad argentina adopte a una comunidad del sur. Una comisión del Gobierno de Israel junto con la Agencia Judía y el Keren Hayesod van a definir cómo será distribuido el dinero que se recaude para la reconstrucción del Sur según en función de las necesidades.
Hay asentamientos en el sur que tienen más dinero que otros, algunos que necesitan más ayuda y otros que requieren algo específico. Como decía previamente lo recaudado se destinará para la educación y la seguridad de esas comunidades. A esto llamamos reconstrucción del Sur y lo realizamos junto a La Agencia Judía.
El segundo es un programa nacional de Resiliencia que está dividido en tres instituciones muy grandes de Israel. El conglomerado de empresas israelíes de alta tecnología, junto al Pikud Haoref (el brazo del ejército encargado de la defensa de la población civil) han creado una iniciativa nacional llamada «Israel Rises» https://ilrises.org/eng/ .
Esta iniciativa se encargará de las áreas de salud mental, educación, cultura y empleo de cientos de miles de personas que han sido afectadas el 7 de octubre y seguirán requiriendo ayuda el resto de sus vidas.
-¿Cómo se vincula eso con el Keren Hayesod?
-Este es el segundo pilar de la campaña de reconstrucción y resiliencia. Su nombre es «Israel se levanta» y está integrado por empresas de alta tecnología y el Keren Hayesod. Nuestro rol es acercar la filantropía del mundo judío a este proyecto. La Cámara de Comercio Israelí y las empresas tecnológicas junto con el Keren Hayesod definirán las necesidades. Estará enfocado más que nada al ámbito de salud mental, educación, cultura y empleo. De esta manera, contribuyendo en la donación al Keren Hayesod, se está donando directamente a Israel.
A partir del 7 de octubre hubo tal movimiento de gente que empezó a pedir donaciones de manera desorganizada, por ejemplo plata para chalecos, para cascos que no llegaron a través del ejército. Hoy en día, en una plataforma online de compra y venta, podés comprar cascos tácticos. Debido a numerosas cantidades de campañas de recaudaciones, hay muchas donaciones que el dinero no llega a donde tenía que llegar. Por otro lado, también tenés pequeñas instituciones que juntaron dinero y lo enviaron para Israel, pero hubo una duplicación de proyectos, porque en caso de que sobre el dinero ¿Dónde termina ese resto? La recaudación del Keren Hayesod tiene dos puntos muy importantes, el primero es que llega a donde la plata se necesita y llega el 100% de la plata recaudada porque se sabe dónde tiene que ir. Lo que está ocurriendo ahora es que se levantó mucha gente para realizar donaciones. Para ayudar a Israel, no se le puede dar dinero a una persona, se dona a una institución. Es importante que la comunidad judía argentina entienda que la donación a través del Keren Hayesod es una donación necesaria que va a lugares que la requieren y hay una transparencia en todo el proceso para cuidar a aquellos que lo necesitan como también la plata de los donantes.
-¿Cuáles son los otros dos pilares?
-El tercero es el Fondo de Víctimas de Terrorismo, que antes del 7 de octubre asistía por año a mil personas. Y hoy necesitamos que funcione para trabajar los próximos cinco años. Hay dinero del Fondo de Víctimas de Terrorismo que la gente dona para un fondo para niños huérfanos, es plata que se va ajustando, no es que es para el día siguiente, es dinero que se va guardando y se van creando intereses para que esa plata de acá en más se trabaje para esos chicos, por eso todo el trabajo que se va a realizar ahora, tanto psicológico a mediano plazo es mucho, son miles y miles de dólares para poder asistir a esa gente que el fondo está ayudando, pensando en todas las familias que todavía tienen los secuestrados adentro, en los niños, en los evacuados. Es muy difícil de entender que lo que pasó el 7 de octubre lo vamos a vivir en los próximos diez años o veinte años. Estamos delante de la masacre más grande desde la Shoá. Hoy hablamos de un trauma nacional.
El último pilar tiene que ver con un trabajo que nosotros veníamos haciendo. desde antes. Siempre el Keren Hayesod acompañó la periferia de Israel, sobre todo la del sur y del norte, que es la que más necesitaba a nivel de educación y seguridad. Actualmente seguimos trabajando por ellos, pero más enfocado en la reconstrucción y resiliencia de esas municipalidades. Por ejemplo una municipalidad del sur que está al lado de Gaza, está totalmente evacuada, en algún momento los pobladores van a tener que volver a habitarla. Antes del 7 de octubre trabajamos mucho ahí en educación para que la gente quiera ir a vivir ahí y no se vaya solamente a Tel Aviv o a Jerusalem. Entonces, ¿Por qué iría a vivir a la frontera de Gaza?
Porque tenés una educación para niños de un nivel muy alto. Hay jardines de infantes tecnológicos, hay un planetario en un jardín, que fueron proyectos realizados antes del 7 de octubre con el Keren Hayesod en esa municipalidad. No la vamos a dejar ahora a la municipalidad. Esos chicos tienen que volver. Tenemos que ayudar a esas familias de acá a un año, a dos años, a que puedan volver y puedan seguir trabajando. Otra municipalidad es Merkaz Hosen, donde están todos los asistentes sociales, psicológicos, para que la gente pueda volver a su rumbo de vida. Pasaron ya cinco meses, hay gente para la que todavía es el 7 de octubre. El gobierno está ayudando a esa gente. Nosotros tenemos que darles el valor agregado. Darles la oportunidad de que puedan volver ahí.
-¿El 2024 va a tener eventos recaudatorios, cuál va a ser la dinámica?
-Va a haber eventos recaudatorios. Estamos trabajando en varios pequeños y medianos eventos con instituciones asociadas. Habrá un evento central. En la primera semana de junio va a estar llegando quien fuera jefe del ejército, que fue uno de los primeros que tomó responsabilidad. El evento va a ser para contribuyentes del Keren Hayesod, pero también va a haber gente de la comunidad en general. Yo creo que la comunidad argentina se merece hacer las preguntas adecuadas y saber qué es lo que lo que va a pasar. Porque siempre supimos que lo que pasa en Israel también repercute acá en Argentina.
-Hubo un reconocimiento en la embajada a algunas instituciones por su actitud importante con CUJA…
-Hubo entre cinco y siete comunidades en Argentina por las que yo me saco el sombrero. Apenas empezó el 7 de octubre, vinieron e hicieron donación como institución. Fueron reconocidas por el embajador, que fue una de las personas que más se nos apoyó en la campaña de emergencia. Estas instituciones dieron plata para la campaña de emergencia, sin haberles pedido nada. Y aparte hicieron todo tipo de eventos para recaudar más dinero. Las instituciones judías tienen también sus propios donantes. Eso significa que “todo judío es responsable el uno por el otro”.
-¿Cómo fue el caso de Lomas de Zamora?
-El 7 de octubre fue un sábado. El domingo y el lunes ya estábamos acá en una sala de operaciones haicendo llamados. Había voluntarios llamando y también llamaron a Lomas de Zamora, a todos lados. A la semana, me llamó por teléfono la presidenta de Lomas de Zamora y me dijo “queremos hacer una donación”.
La donación fue muy significativa y el dinero fue en un 100% para el Fondo de las Víctimas del Terrorismo.