Itongadol.- El tenista alemán Alexander Zverev, notablemente indignado, detuvo su partido cuando un aficionado le gritó «Deutschland uber alles» (Alemania por encima de todo), durante un encuentro de los octavos de final del US Open disputado anoche en Nueva York.
Zverev estaba sacando en el segundo punto del quinto game del cuarto set, contra el italiano Jannik Sinner, cuando de repente se dirigió al juez James Keothavong y exigió que expulsaran al espectador.
Acaba de decir »la frase más famosa de Hitler que existe en el mundo», expresó Zverev al árbitro. »Es inaceptable», agregó el alemán.
Keothavong consultó de inmediato a los agentes de seguridad e incluso se dirigió a la tribuna para que identificar al responsable. Pasados unos minutos, lo reconocieron y le ordenaron que abandonara el estadio.
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El fanático, que estaba sentado en una sección en la que las entradas cuestan unos 3.000 dólares cada una, fue escoltado fuera de su asiento por los guardias de seguridad.
El personal de seguridad pareció hablar brevemente con el hombre, que estaba sentado con una mujer -aunque no está claro si asistieron juntos-, antes de que se levantara de su asiento y abandonara el estadio.
Zverev, cabeza de serie número 12, que se impuso a Sinner, sexto en el ranking, explicó tras el partido: «Empezó a cantar el himno de Hitler, ‘Alemania, Alemania por encima de todo’. Fue demasiado. Como alemán, no estoy orgulloso de esa historia y no considero correcto hacer eso. Estaba sentado en primera fila, así que mucha gente lo escuchó. Si yo no hubiera reaccionado, hubiese estado mal por mi parte».
“Me encanta cuando los aficionados son activos” y “hacen ruido”, pero consideró que eso era “demasiado”, concluyó el tenista alemán.