Itongadol/AJN.- El Museo Diocesano Tridentino (foto), dependiente de la Arquidiócesis de Trento, inaugurará mañana, viernes, la histórica exposición «La invención del culpable», que se propondrá denunciar la propaganda y cultura antisemitas subyacentes detrás del mito de los supuestos crímenes rituales judíos, como el famoso «caso Simonino», un niño de 2 años desaparecido el 23 de marzo de 1475, cuya muerte fue adjudicada a la treintena de hebreos locales, bajo la falsa motivación de utilizar su sangre con fines religiosos de cara a Pésaj (Pascuas), lo cual generó arrestos, torturas y asesinatos.
La iniciativa, apoyada por las autoridades civiles y católicas de esa ciudad del norte de Italia, estará dedicada a desacreditar «atroces noticias falsas del pasado» y «una de las páginas más oscuras» de la historia, que se remonta más de cinco siglos.
La mentira promovida por el arzobispo Johannes Hinderbach recién fue reconocida como tal por la Iglesia en 1965, tras años de investigación de la intelectual judía Gemma Volli y el historiador eclesiástico Iginio Rogger.