Itongadol.- El presidente de la Confederación Europea Maccabi, Motti Tichauer dialogó con Agencia AJN y remarcó sus observaciones sobre la dura situación de antisemitismo que se vive en Alemania, además hizo hincapié en que es una enfermedad que no se puede sanar.
Motti Tichauer, presidente de la Confederación Europea Maccabi, conversó con Agencia AJN y destacó que los neonazis están generando amenazas directas para la vida de los judíos en alemania.
Para Tichauer, el antisemitismo existe y va a seguir existiendo en las sociedades europeas, afirmó en diálogo con Agencia AJN.
Además, explicó que los ataques se están transformando cada vez más en violencia física y que ocurre de manera constante.
¿Qué análisis hace sobre lo ocurrido en la sinagoga alemana de Halle?
Es la punta del iceberg! Durante muchos años, el antisemitismo se convirtió en algo más físico, los ataques ocurren de manera periódica en toda Alemania y alrededor de Europa. Las esvásticas en las sinagogas se volvieron algo ‘normal’.
¿Este ataque refleja el creciente antisemitismo en Europa?
Este ataque trae una nueva dimensión para Alemania, planear una masacre para Iom Kipur muestra que los neonazis entraron en una nueva etapa de amenazar la vida de los ciudadanos judíos de Alemania.
Los políticos, que siempre parecieron estar ciegos a la hora de ver lo que pasa, tienen que pelear de manera drástica contra esta nueva amenaza a la democracia alemana.
¿Cual es su opinión sobre el antisemitismo en general?
El antisemitismo existe y va a seguir existiendo en las sociedades europeas, es una enfermedad que no se puede sanar desafortunadamente.
La tolerancia y el libre ejercicio de la religión es un bien precioso de la democracia. Los judíos alemanes son una parte integral de la sociedad alemana, desafortunadamente no aceptada por todas las personas.
¿Que conclusión hace sobre la situación actual?
Mi conclusión es que hay que estar alerta y continuar luchando contra el racismo y el antisemitismo en todos los países de Europa. El pueblo judío pertenece a Europa, aunque a veces tengo la impresión de que es tiempo de empacar las maletas y hacer Aliá (regresar a Israel).