Itongadol.- Un nuevo enfrentamiento se suscitó en Chile entre la comunidad palestina local y el embajador de Israel en ese país, Gil Artzyeli, a quien la primera acusó de ‘intervenir en asuntos internos’ por invitar al Gobierno a sumarse a la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA) y combatir el antisemitismo.
«La Comunidad Palestina me acusa de ‘intervenir en asuntos internos de Chile’. El antisemitismo no es un asunto interno y siempre será un asunto de atención para Israel y para otros países. Por algo el Departamento de Estado de EEUU creó una Oficina Especial para el Monitoreo y Combate del Antisemitismo en todo el mundo. El problema no es alertar sobre el antisemitismo, sino guardar silencio», posteó el diplomático en su cuenta oficial en X.
«Hablando de antisemitismo, justo la semana pasada publiqué un artículo en El Mercurio invitando a Chile a sumarse a la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto (IHRA), un foro global voluntario y no vinculante que ya cuenta con la adhesión de 35 países democráticos que avalan los DDHH», contextualizó.
«Esta invitación fue rechazada por el presidente de la Comunidad Palestina y la directora del Centro de Información Palestina, ambos preocupados porque se podrían frenar las críticas a Israel. Esta preocupación no tiene sustancia, porque la IHRA no pone ningún límite para criticar a Israel como a cualquier otro país del mundo», aclaró Artzyeli.
«Criticar sí, pero discriminar y manipular la historia es otra cosa. Por ejemplo, comparar la guerra de Israel para desmantelar la infraestructura terrorista de Hamás con la persecución nazi y el exterminio de los judíos en el Holocausto, es una aberración. Si alguien tiene cuestionamientos a las operaciones de Israel contra Hamás, es legítimo, pero Gaza no es Auschwitz», diferenció.
«¿Qué es Hamas? Hamas, un grupo terrorista abiertamente antisemita. La carta fundacional de Hamas dice en artículo 7: ‘Cuando el judío se esconda detrás de las rocas y los árboles, las rocas y los árboles dirán: «Oh musulmanes, oh Abdullah, hay un judío detrás de mí, ven y mátalo»‘. Lamentablemente, en Chile, Hamás cuenta con el apoyo del presidente de la Comunidad Palestina, Maurice Khamis Massu, quien declaró: ‘Ahora, yo con Hamas, absolutamente lo apoyo, porque Hamas es un movimiento de resistencia’. En este caso, la palabra ‘resistencia’ es un eufemismo para la aniquilación de Israel», criticó su embajador.
«Estar a favor de la creación de un estado palestino no es antisemita, pero propiciar que ese estado surja borrando a Israel del mapa, sí lo es. La masacre de 7 octubre de 2023 dio inicio a ataques contra Israel desde siete frentes, liderados por el régimen fundamentalista de Irán y sus proxies, con la finalidad de eliminar a Israel», recordó.
Asimismo, «el presidente de la Comunidad Palestina alude al tamaño de su comunidad como argumento para no sumarse a IHRA. El hecho que en Chile vivan alrededor de 150.000 descendientes de palestinos no puede usarse para legitimar el antisemitismo», puntualizó Artzyeli.
«Por otra parte, la directora del Centro de Información Palestina argumenta que “los judíos gozan de los mismos derechos que todos los chilenos”. Es cierto, pero en Chile los discursos de odio contra los judíos se han traducido en amenazas, vandalizaciones y agresiones contra sinagogas, escuelas y eventos culturales, situaciones que no se repiten contra ninguna otra minoría religiosa o social. La historia nos ha mostrado que los judíos están amenazados en forma e intensidad particulares, lo que hace 80 años llevó al exterminio de un tercio del Pueblo Judío», alertó.
«Los inventos lingüísticos de ‘palestinofobia’ y ‘arabofobia’ no lograrán acallar la preocupación verdadera del mundo democrático por el terrorismo palestino y el islam radical», advirtió el embajador de Israel.
«Resulta difícil de comprender que chilenos cristianos, por mucho que sean de origen palestino, promuevan campañas que cuestionan el derecho de Israel a existir, alineándose así con la visión más radical del islam», subrayó, junto con un conocido video del 7 de Octubre.
El ataque al representante de Israel generó otros repudios, como el de la oficina latinoamericana del Centro Simon Wiesenthal: «Adherimos en un todo. No aceptar la Definición de IHRA y desconocer la hostilidad que ellos mismos ejercen sobre los ciudadanos judíos chilenos los condena. El antisemita jamás se reconocerá como tal del mismo modo que el estafador dice que es un negociante honesto o el violador que la víctima lo provocó».
En tanto, la vicepresidenta para Asuntos Internacionales de la Liga Antidifamación y ex embajadora en Chile, Marina Rosenberg, tuiteó: «Cuando la Comunidad Palestina de Chile niega el antisemitismo cada vez que aparece, pierde legitimidad para pretender definirlo. No aceptamos que se nos imponga una lectura que borra nuestras experiencias, relativiza el odio antijudío y normaliza el hostigamiento hacia quienes se identifican como judíos. Invisibilizar el antisemitismo bajo la excusa de que es ‘instrumentalizado’ no lo hace desaparecer: lo refuerza».