Itongadol.- Al cumplirse 20 meses del ataque de Hamás contra Israel, Kadima inauguró el sábado 7 de junio su plaza en homenaje a la familia Bibas.
Durante el evento, Pablo Reisman, presidente de la institución, brindó unas palabras alusivas e inauguró el monumento que contiene las imágenes de Shiri, Ariel y Kfir, con un corazón de piedras naranjas, el color utilizado para honrarlos.
Por su parte, Yamil Ostrovsky, director de Cultura de Kadima, manifestó: “Aquí, en esta plaza, hoy plantamos un naranjo. Un árbol sencillo, pero cargado de sentido: crecerá, echará raíces, y un día dará frutos que podrán ser compartidos. Por esta plaza se pasa, no es destino sino un tránsito. Pero a partir de hoy, será también una marca en el camino. Una pausa en medio del andar. Un espacio que nombra.
Porque cada persona que cruce este lugar llevará, aunque sea por un instante, el recuerdo de Shiri, de Ariel, y de Kfir Bibas”.

“Sus nombres ya no son sólo palabras: son un símbolo, son presencia, son memoria. Y mientras los recordamos a ellos, no podemos dejar de pensar en quienes hoy, 20 meses después, siguen secuestrados. Todavía lejos de su hogar, de sus vidas. Pensamos en ellos. Los esperamos. No los olvidamos”, agregó.
“Que este rincón, que hoy inauguramos como Kikar Bibas, nos recuerde que incluso en el paso apurado de los días, hay lugares que nos llaman a detenernos.
Porque donde hay memoria, hay futuro. Y porque el futuro que anhelamos empieza con un regreso”, concluyó.
Luego de las palabras, los presentes escucharon la canción “Ha Baita” (A casa), que se ha convertido en un símbolo para el pedido de que los rehenes estén de nuevo en casa.
De esta manera, Kadima se colocó a la vanguardia en la toma de acción en memoria de todos aquellos que ya no están físicamente con nosotros.