Itongadol/Agencia AJN.- El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, respondió a las críticas de los medios por sus comentarios de anoche, en conferencia de prensa, sobre las próximas elecciones y el rol de Catar en el financiamiento de la Masacre del 7 de Octubre, en un video en hebreo posteado en su cuenta X.
Negó haber omitido confirmar que las elecciones se realizarán el año que viene: «Espero que se realicen a término; estoy haciendo todo lo posible para que no se adelanten, pero les puedo decir una cosa: no se harán después de la fecha límite. ¿Saben por qué? Porque somos demócratas: creemos que el público tiene derecho a elegir”.
En cambio, sus oponentes políticos creen: “¿Y qué si sos elegido? Nosotros decidiremos” e intentarán imponer “todo tipo de cosas contrarias a la ley vigente”. Netanyahu citó como ejemplos sus disputas legales con la procuradora del Estado sobre su autoridad para nombrar al jefe del Shin Bet y al comisionado del Servicio Civil.
También negó que el dinero transferido por Catar a la Gaza gobernada por la organización terrorista palestina Hamás a petición suya haya permitido ese ataque sin precedentes, ya que los invasores “nos atacaron en chancletas y con AK-47 y camionetas, que cuestan monedas”.
«¿Qué armas usaron? ¿Qué usaron que requiriera dinero? Camionetas, Kalashnikov, RPG… eso no cuesta nada. Y realmente, no era una enorme reserva de cohetes. Ya saben lo que hacen: toman barriles de metal, ponen explosivos dentro y eso es todo. Una unidad pequeña puede hacerlo. No cuesta dinero», dijo Netanyahu.
“La ayuda financiera catarí fue una pequeña parte de un flujo de fondos mucho mayor que llegó a Hamás. Provenía de las Naciones Unidas, de agencias internacionales, de países europeos, de Irán… provenía de todas partes. El dinero catarí fue solo una pequeña parte”, afirmó.
“Esa ayuda estaba destinada a 100.000 gazatíes que viven por debajo del umbral de la pobreza. Se destinaba a solucionar el problema de las aguas residuales, prevenir enfermedades, proporcionar un suministro mínimo de electricidad, etc. De eso se trataba, así que no, ese dinero en realidad no se utilizó para construir armas ni nada por el estilo”, continuó Netanyahu.
«Así que esto no fue una cuestión financiera y no se trataba del dinero de Qatar. Fue una cuestión de fracasos, y todavía tenemos que preguntarnos qué pasó allí. ¿Por qué? ¿Por qué [las FDI] no desplegaron los escuadrones de reserva? ¿Por qué no activaron a la Fuerza Aérea a tiempo? ¿Por qué no le informaron al primer ministro, a mí? ¿Quién hizo esa llamada?», preguntó.
“Hay muchas preguntas, y esas son las que verdaderamente deben investigarse. Y quiero investigarlas. A todas. Que pregunten todo: sobre Qatar, sobre lo que quieran… Todo. Y hay respuestas”, dijo Netanyahu sobre la necesidad de establecer una comisión investigadora del ataque, pese a que se opone a una estatal, que según sucesivas encuestas es la opción preferida por la mayoría de los israelíes.
Añadió que las preguntas sobre las directivas de las FDI son las más apremiantes: «esas son las preguntas más importantes: ¿cómo ocurrió este desastre? Y lo descubriremos».