Itongadol.- Los Hutíes de Yemen confirmaron este martes que estuvieron detrás del ataque con un avión no tripulado del pasado viernes a un barco portacontenedores de bandera portuguesa en los confines del mar Arábigo. De esta manera los rebeldes aumenta la preocupación con respecto a sus capacidades
El ataque contra el MSC Orion, a unos 600 kilómetros de la costa de Yemen, parece ser el primer asalto en alta mar reivindicado por los Hutíes, que cuentan con el apoyo de Irán, desde que comenzaron a atacar embarcaciones en noviembre.
Según el Centro Conjunto de Información Marítima (CCIM), que opera como parte de las Fuerzas Marítimas Combinadas dirigidas por Estados Unidos en Medio Oriente, el buque «sólo sufrió daños menores y toda la tripulación a bordo está a salvo».
El MSC Orion estuvo asociado con Zodiac Maritime, con sede en Londres, que forma parte del Grupo Zodiac del multimillonario israelí Eyal Ofer.
En relación a esto, el CCIM afirmó en un informe «que el MSC Orion fue probablemente atacado debido a [su] supuesta afiliación israelí».
El general de brigada Yahya Saree, portavoz militar de los Hutíes, reivindicó esta tarde el ataque contra el Orion, sin explicar por qué tardaron días en reconocer el ataque, que genera incertidumbre acerca de cómo llevaron a cabo un asalto a cientos de kilómetros de las costas de Yemen contra un objetivo en movimiento.
Hasta el momento, se desconoce si los rebeldes operan una flota naval expedicionaria, o si tienen acceso a satélites u otros medios sofisticados para controlar drones de larga distancia.
Occidente y los expertos consideran que Irán, que suministró a los Hutíes en su guerra de años en Yemen, está detrás de al menos un ataque complejo reivindicado por los Hutíes: el de 2019 contra los campos petrolíferos de Arabia Saudita que redujo temporalmente a la mitad la producción energética del reino.
La República Islámica también opera habitualmente buques militares en el mar Arábigo y acaba de apoderarse del MSC Aries, de bandera portuguesa, y de su tripulación justo antes de su ataque sin precedentes con drones y misiles contra Israel el 13 de abril.