Itongadol/AJN.- Los 120 miembros de la 23ª Knesset juraron hoy, lunes, de a tres para cumplir con la nueva recomendación del Ministerio de Salud de que las personas se reúnan en grupos de 10 o menos para ayudar a detener la propagación del coronavirus.
Los primeros fueron el titular de la Knéset, Yuli Edelstein (arriba, a la derecha, en la foto), el primer ministro, Benjamín Netanyahu (abajo, de espaldas), y el líder de Azul-Blanco, Benny Gantz (a la izquierda).
En su discurso casi en soledad, el presidente Reuven Rivlin (arriba, a la izquierda) los instó a continuar las conversaciones para una coalición que comenzaron anoche, en su Residencia.
«La crisis política es muy profunda y nos divide por la mitad, pero no tenemos otro Estado ni otra nación; solo tengo una petición para ustedes: denle a este pueblo un gobierno», expresó.
Edelstein se ofreció a mediar para un gobierno de unidad y no hizo referencia a los esfuerzos de Azul-Blanco por reemplazarlo.
Sus abogados le enviaron hoy, lunes, una carta para advertirle que si no convoca a la Knesset para votar su sustitución, el partido apelaría a la Corte Suprema.
También solicitaron la intervención del asesor legal del Estado, Avichai Mandelblit.
En tanto, Israel Beytenu presentó un controvertido proyecto de ley dirigido a Netanyahu que evitaría que un legislador imputado pueda formar gobierno.