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La policía francesa que atacó a una célula terrorista islamista el fin de semana encontró documentos que muestran que el grupo estaba planeando nuevos ataques a la comunidad judía: 27.000 euros en efectivo, una lista de organizaciones judías en el área de Paris, amuniciones, manuales islamistas y documentos “extremadamente” antisemitas.
Luego de la embestida a la célula que se cree responsable por el ataque a un supermercado kosher en el suburbio parisino, se aumentó la protección policial en la sinagoga, colegios judíos y otras instituciones judías. En un encuentro con los líderes de la comunidad judía, el presidente francés Francois Hollande prometió darle máxima prioridad a la evidente y creciente amenaza de militantes islamistas contra objetivos judíos.
En el ataque, la policía asesinó al líder del grupo, Jeremie Luis-Sidney, un neófito salafista de 33 años, y arrestó a una docena de miembros. Pero las autoridades dijeron que incluso después del operativo, todavía hay varias células antisemitas similares en todo el país. Según un ex jefe de los Servicios de Inteligencia Francesa, entre 100 y 200 islamistas militantes son terroristas potenciales.
“Varios otros grupos similares están siendo vigilados. Hay una amenaza real. El islamismo radical se alimenta de fantasías, del odio contra nuestro país o contra los judíos franceses”, dijo el ministro del interior, Manuel Valls, quien advirtió que estas pequeñas células locales son incluso más difíciles de combatir que los movimientos jidahistas internacionales. “Es más difícil combatir estos grupos cuando son locales. No son redes terroristas extranjeras que vienen de afuera, sino redes internas que han crecido en nuestro país, en nuestro barrio. No son de afuera, sino cubiertas francesas, musulmanes franceses”, agregó.
Evidencia policial encontrada durante las operaciones de arresto del fin de semana en Estrasburgo, Cannes y el suburbio Torcy de París mostró que es probable que el grupo sea responsable del ataque contra el supermercado kosher Naori en el suburbio parisino de Sarcelles el 19 de septiembre, dijeron las autoridades. En el ataque, el cual ocurrió poco después de Rosh Hashaná (año nuevo judío), dos hombres encapuchados vestidos de negro tiraron al menos una granada al local, lo cual hirió a una persona. Seis días después, expertos forenses encontraron la huella digital del líder de la célula en el dispositivo.