Miles de peregrinos judíos y cristiano visitarán Jerusalem, para celebrar sus fiestas respectivas.
Los peregrinos cristianos participarán en la tradicional procesión por la Vía Dolorosa en la Ciudad Vieja, que narra el último viaje de Cristo a su crucifixión.
Por otra parte, los peregrinos judíos se congregarán en el Muro de los Lamentos en el ocaso, para dar comienzo a Pesaj, que conmemora el éxodo bíblico de Egipto.
Debido a la importancia de ambos festjos, las fuerzas israelíes están en estado alerta.
Para mayor seguridad en todo el país, el portavoz de la policía, dijo que habrá más oficiales en los lugares públicos, y una gran presencia policial en la Ciudad Vieja de Jerusalem, el punto central de las conmemoraciones de Semana Santa en Tierra Santa.
Además, dijo que la alerta está en el segundo nivel más alto, y señaló que éste era el mismo nivel que en años anteriores.
El ejército israelí también cerró los puntos de cruce hacia y desde Cisjordania hasta la noche del sábado. Sin embargo, un comunicado militar dijo que Israel ha permitido entrar, en Israel o en Cisjordania, a una pequeña comunidad cristiana de 500 de la Franja de Gaza.
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