El único basquetbolista israelí en la NBA estadounidense, Omri Casspi, volvería a Macabi Tel Aviv en enero de confirmarse la previsible pérdida de la temporada por el conflicto entre los jugadores y los dueños de los equipos.
A fines de agosto, la estrella israelí había descartado su regreso debido a los elevados impuestos que debería abonar por sus ganancias en el exterior, pero ante la falta de solución en los Estados Unidos y las infructuosas ofertas de Spartak de San Petersburgo y Lyon Villeurbanne de Francia decidió reanudar sus conversaciones con Macabi, que hoy, martes, llegaron a un eventual buen término.
“Maccabi y yo hemos firmado el contrato y estoy tan feliz como en todo regreso a casa”, escribió Casspi en su perfil de Facebook.
“Estoy muy emocionado de volver a casa, con mi familia y los mejores hinchas del mundo”, agregó.
“La razón por la cual recién llegaré en enero es que no quiero que Macabi sufra el hecho que dos jugadores dejen el equipo al mismo tiempo si finalmente hay temporada de la NBA”, explicó el basquetbolista.
Casspi aludió al ayuda-base judeoestadounidense y bicampeón de la NBA Jordan Farmar, quien estaba jugando para New Jersey Nets hasta que comenzó la citada disputa.
Casspi fue seleccionado por Sacramento Kings (foto) hace dos años y pasó a Cleveland Cavaliers al final de la temporada pasada, pero todavía no llegó a debutar en su nuevo equipo.
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