El primer ministro israelí, Ariel Sharon, envió hoy una clara advertencia a los que osen atacar a Israel al inaugurar en Jerusalén las ceremonias en recuerdo a la Shoah, el genocidio judío llevado a cabo por el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial.
«Nunca permitiremos a los asesinos de hoy, ni a los de mañana, que ataquen a nuestro pueblo. Aquel que ose hacerlo, será castigado», declaró Sharon en la ceremonia celebrada en Yad Vashem, el memorial del Holocausto.
«El Estado de Israel no olvida. Sabe lo que el odio a Israel ha generado en el pasado. Es consciente del odio en el entorno y sabe qué hacer», prosiguió el primer ministro.
«Preferimos la paz, ya que tal es nuestro sueño y nuestra voluntad, pero no guardaremos la espada de nuestra defensa (…). Israel exhorta a todos los hombres libres a recordar, a no olvidar nunca» la Shoah, concluyó Sharon.
Seis supervivientes del Holocausto encendieron cada uno seis antorchas en recuerdo de seis millones de judíos que perecieron en los campos de concentración nazis. El presidente israelí, Moshe Katzav, también participó en la ceremonia, en la que la bandera israelí fue izada a media asta. El lunes por la mañana, a las 10:00 –hora local– (las 9:00 en España), las sirenas ulularán en todo el país reclamando dos minutos de silencio.
Sharon afirmó en el Consejo de Ministros que la política de eliminación de los «jefes de las organizaciones terroristas» va a continuar, después del asesinato, la víspera, con un misil al jefe de Hamás en los territorios ocupados, Abedelaziz al Rantissi.
Rantissi se convirtió en jefe de Hamás en los territorios ocupados después del asesinato, el 22 de marzo, del fundador de este grupo radical islamista, el jeque Ahmed Yassín, en circunstancias similares en Gaza.
Fte E.Press