El primer ministro israelí, Benjamin Netanyhau, dijo anoche que está convencido de que los ministros en su gobierno aprobarán una propuesta que avanza el proceso de paz y al mismo tiempo preserva los intereses de Israel.
“Estamos conduciendo charlas intensivas con EE.UU. para alcanzar un entendimiento en el que avancemos sobre el proceso de paz”, expresó Netanyahu durante un discurso en el Instituto de Tecnología Technion.
“Si recibimos una propuesta que avanza sobre la paz y preserva los intereses de Israel, principalmente la seguridad, la llevaré ante el gabinete y no tengo duda de que los otros ministros la aprobarán”, dijo.
Ayer por la mañana, un funcionario estadounidense dijo que EE.UU. demandará que Israel se abstenga de construir tanto en Cisjordania como en Jerusalem, como parte de la moratoria de 90 que pidió la secretaria de estado americana, Hillary Clinton, a cambio de un paquete de incentivos.
Netanyahu se encontró con el líder del partido ortodoxo israelí Shas, Eli Yishai, y el ministro Ariel Attias el miércoles para convencerlos a que no veten el congelamiento de las construcciones cuando se lleve la moción al gabinete.
Pero el funcionario dijo: “Si la moratoria pasa, continuaremos presionando para que haya calma en Jerusalem del Este durante los 90 años, sin importar lo que Bibi (Netanyahu) le haya dicho a Shas”.
También agregó que el presidente americano, Barak Obama, se comprometió con un mensaje oral con el líder de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, el último abril y que espera que ambos lados se abstengan de “acciones que puedan minimizar la confianza”, incluyendo Jerusalem del Este, y puedan responder con “pasos, acciones o un ajuste en la política” a cualquier acción provocativa mientras se estén llevando a cabo las negociaciones.
La administración de EE.UU. definió a los grandes anuncios de construcciones, demoliciones o desahucios en Jerusalem del Este como “acciones que pueden minimizar la confianza”.