Pero al contrario que Israel también comparten otro rasgo visible: ninguna de sus barreras ha sido amenazada con la condena por la Corte Internacional de Justicia; ni han recibido cobertura al minuto en la CNN.
Cada uno de estos países erigió una valla por la simple razón de que eso es lo que los estados tienden a hacer cuando sienten que se están amenazando sus intereses.
La de Kuwait fue levantada por razones bastante obvias, gracias a un una vez hostil Irak, mientras que la barrera de Corea del Sur está concebida para contener una posible invasión de su vecino comunista del norte.
Lituania vio apropiado trazar una frontera de metal a lo largo de su frontera con Bielorrusia, igual que Namibia hizo con su vecina Angola, India lo ha hecho con Pakistán y los Estados Unidos con México. Eslovaquia y Ucrania se demarcan de manera similar, mientras que Arabia Saudita consideró recientemente construir una valla a lo largo de su frontera con Yemen.
Y la lista no termina allí.
Hace cinco años, España gastó más de 35 millones de dólares en levantar una valla de 10 pies alrededor de su enclave Norteafricano de Melilla, separándolo del resto de Marruecos. Consiste en dos filas de barricadas, de cámaras de seguridad de alta tecnología, de sensores de fibra óptica y de un camino para acomodar las patrullas de policía. El gobierno Español pasó por todo este trance para evitar la marea de marroquíes que intentaban cruzar la frontera de forma ilegal.
¿No suena ahora eso familiar?
Incluso Sudáfrica, que tan descaradamente criticó a Israel en la audiencia de apertura en La Haya, ha invertido diez de millones de rand en los últimos años para reforzar su propia valla de frontera a lo largo del río Limpopo, que delinea el límite con Zimbabwe.
¿La razón? tener a raya al ganado que puede tener fiebre aftosa.
A lo cuál no puedo evitar preguntar: ¿Por qué es aceptable que Sudáfrica mantenga a raya a las vacas, pero no que Israel corte el paso a los terroristas suicidas?
Hay incluso una valla de frontera que se extiende unas 10 millas entre Inglaterra y Escocia, y no han mantenido una guerra cara a cara desde hace siglos.
Tampoco puede argumentarse que el problema con la valla de Israel es que no está en una frontera reconocida. Pakistán protesta por una elaborada valla erigida por India en la disputada Cachemira. Y aún así el mundo no grita que India está robando el «territorio pakistaní ocupado».
«La valla será una barrera permanente para evitar que los militantes entren», dijo el jefe de la Fuerza de Seguridad Fronteriza de la India en Cachemira al Washington Post el verano pasado. «¿Por qué debemos esperar a que entren y ataquen a nuestra gente?».
Con tantas vallas levantándose en tantos lugares alrededor del mundo, ¿por qué entonces es Israel, y solamente Israel, el que se encuentra en la palestra en este asunto?
La respuesta, parece, es absolutamente simple: el mundo esencialmente está diciendo al Estado Judío que ruede y muera.
Nos critican cuando nos defendemos activamente con medios militares, y ahora intentan condenarnos por adoptar medidas pasivas tales como levantar una valla.
Tomemos, por ejemplo, al Secretario General de las Naciones Unidas Kofi Annan. Poco después de que los Palestinos lanzaran la actual campaña de terrorismo en Septiembre del 2000, Annan subió al podio en el Consejo de Seguridad de la ONU e invitó a Israel «a utilizar métodos no letales» para calmar los brotes de malestar Palestino.
Y aún así, cuando Israel procedió a hacer justamente eso iniciando la construcción de la valla de seguridad, Annan decidía liderar la carga contra él.
En un informe sometido a la Asamblea General de la ONU el 24 de noviembre del 2003, condenó a Israel por erigir la barrera, llamándola «un acto profundamente improductivo».
Así que si Israel utiliza medios militares contra el terrorismo Palestino es inaceptable para Annan, y él considera medios no militares tales como la valla «improductivos». ¿Cómo espera exactamente el Secretario General que el Estado Judío proteja a sus ciudadanos?
Ahora que nadie me malinterprete; Pienso que la construcción de la valla de seguridad es un sustituto lamentable de una política eficaz de contraterrorismo por parte de Israel. De hecho, más que cercar a los autores del terrorismo, el gobierno está cercando a sus víctimas previstas.
Pero eso de ninguna manera da a las naciones del mundo el derecho a juzgar al Estado Judío. De encontrarse en una situación similar no dudarían en actuar para asegurar la seguridad de sus ciudadanos.
En verdad, no es que la cerca incorpore partes de Judea y de Samaria lo que preocupa a nuestros acusadores, ni les importa realmente la inconveniencia que puede ser que cause a algunos palestinos.
Lo que verdaderamente parece perturbarlos es que ahorre algunas vidas de judíos. Y ése, por lo que a ellos se refiere, es quizá el crimen más imperdonable de todos.
Fte CUJA-K.H