El presidente del Estado de Israel, Moshé Katzav, fue acusado de «acoso sexual» por una ex empleada de un ministerio que él dirigía, informó este martes el diario israelí Maariv, mientras el jefe del Estado hebreo rechazó las acusaciones a pesar de no haber emprendido niguna acción legal.
La empleada, que mantuvo el anonimato, afirmó al diario que hace más de 10 años fue víctima de «acoso sexual» por parte de Katzav y tuvo que abandonar su cargo por «haber rechazado sus proposiciones».
El jefe del Estado israelí rechazó esas acusaciones, afirmando en un comunicado que «no tenía ni la más mínima idea» de la identidad de la querellante.
Este caso se da cuando Katzav ya se había declarado víctima de una tentativa de chantaje por «acoso sexual» de una ex empleada de la presidencia.
El domingo, una fuente judicial precisó que el presidente había dado cuenta al fiscal general del Estado israelí, Menahem Mazouz, de que una ex empleada de la presidencia había amenazado con acusarlo por «acoso sexual» y había exigido un puesto en un ministerio a cambio de su silencio.
A pesar de todo, hasta ahora Katzav, implicado en este asunto que ha alimentado los titulares de prensa israelíes, no se ha querellado.
La fiscalía pidió un complemento de información al presidente por las posibles querellas y podría solicitar el concurso de la policía para iniciar una investigación.
Moshé Katzav, de 61 años, curtido hombre político del partido Likud (oposición de derecha), se había convertido en el primer hombre de derecha en ocupar las funciones de presidente del Estado hebreo.
Nacido en Irán, llegó a Israel poco después de su creación, en 1948. En varias ocasiones ha ocupado funciones ministeriales, en particular en Transportes y Turismo.