Itongadol.- Un vuelo de Ethiopian Airlines con 157 personas a bordo se estrelló poco después del despegue el domingo por la mañana desde la capital de Etiopía cuando se dirigía a Nairobi, según informó la aerolínea.
Asimismo confirmó más tarde que dos pasajeros israelíes estaban a bordo del avión que se estrelló.
No hubo detalles inmediatos sobre la causa del accidente del avión Boeing 737-8 MAX, que era nuevo y se había entregado a la aerolínea en noviembre.
La emisora estatal de Etiopía, EBC, dijo que todos los pasajeros estaban muertos, y agregó que incluían 33 nacionalidades.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel había dicho anteriormente que estaba verificando si había pasajeros israelíes a bordo.
La ruta Addis Abeba-Nairobi es a menudo utilizada por los israelíes, ya que no hay vuelos directos entre Israel y Kenia. El canal 13 informó que el avión que se estrelló había estado en Israel el miércoles pasado.
La aerolínea estatal Ethiopian Airlines, considerada ampliamente como la aerolínea mejor administrada de África, tiene la ambición de convertirse en la puerta de entrada al continente.
En comunicado de prensa, la aerolínea informó que 149 pasajeros y ocho miembros de la tripulación estaban en el avión que se estrelló seis minutos después de salir de Addis Abeba en su camino hacia la capital de Kenia. El accidente ocurrió alrededor de Bishoftu, o Debre Zeit, a unos 50 kilómetros al sur de Addis Abeba.
Una declaración de la oficina del primer ministro etíope ofreció sus más profundas condolencias a las familias.
«Mis oraciones van a todas las familias de los que estaban a bordo», dijo el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta.
La base de datos de aviación civil de Planespotters muestra que el Boeing 737-8 MAX se entregó a Ethiopian Airlines a mediados de noviembre.
En octubre, otro Boeing 737-8 MAX cayó en el mar de Java minutos después de despegar de Yakarta, la capital de Indonesia, con un saldo de 189 personas muertas.
El último accidente mortal de un avión de pasajeros de Ethiopian Airlines fue en 2010, cuando un avión se estrelló minutos después del despegue de Beirut, matando a las 90 personas a bordo.
El desplome del domingo se produce cuando el primer ministro reformista del país, Abiy Ahmed, ha prometido abrir la línea aérea y otros sectores a la inversión extranjera en una importante transformación de la economía centrada en el Estado.
Ethiopian Airlines se ha expandido de manera asertiva, recientemente abrió una ruta a Moscú y en enero inauguró una nueva terminal de pasajeros en Addis Abeba para triplicar la capacidad.