Itongadol.- La compañía no ha cambiado la receta, pero sí los ingredientes y el proceso de producción para cumplir con las normas islámicas. Bajo el hashtag #BoycottToblerone, la extrema derecha alemana asegura que no lo comprarán más.
La compañía no ha cambiado la receta, pero sí los ingredientes y el proceso de producción para cumplir con las normas islámicas. Bajo el hashtag #BoycottToblerone, los detractores aseguran que ya no lo comprarán más.
La extrema derecha alemana se ha llevado las manos a la cabeza con Toblerone, el emblemático chocolate suizo cuyas tabletas se venden en forma de triángulo. Y es que, según informa Fox News, la certificación halal que ha conseguido la compañía no ha sentado nada bien en filas del partido.
“No hay islamización ni en Alemania ni en Europa”, ironizó en Twitter Jorg Muthen, de Alternativa para Alemania (AFD). “Por lo tanto es pura coincidencia que dicha variedad conocida de chocolate tenga ahora la certificación halal”.
Sus seguidores se sumaron enseguida y aseguran que ya no lo comprarán más. Todo ello bajo el hashtag #BoycottToblerone. “Qué mal. Me gusta comer, pero no me gusta la comida musulmana”, escribió uno en Facebook. La receta, según Fox, que cita fuentes de Toblerone, sigue siendo la misma, pero los ingredientes y el proceso de producción se han modificado para cumplir con las normas islámicas. “La receta original no ha cambiado”.
La certificación Halal, según la Asociación Española para la Calidad, debe satisfacer los siguientes requisitos: No incluir, ni contener en su composición nada que sea considerado ilícito con arreglo a la ley islámica. Los alimentos deben ser preparados, elaborados, transportados o almacenados, utilizando aparatos o medios que estén exentos de aquello que sea ilícito según la ley islámica. No haber estado en contacto directo con otros alimentos que no satisfagan los requisitos anteriores.