AJN.- El diputado árabe israelí Basel Ghattas fue arrestado anoche tras declarar en sede policial en la causa en la que se lo investiga por la supuesta entrega de teléfonos celulares y documentación a presos palestinos de seguridad. “Entregué sobres a los presos, pero no sabía qué contenían”.
El diputado Basel Ghattas envió en la tarde de ayer una carta al presidente de la Knesset, Yuli Edelstein y al titular de la Comisión de Asuntos Parlamentarios, Yoav Kish, en la que renunciaba a sus fueros parlamentarios y anunciaba que se sometería a investigación policial por los delitos de los que se lo acusan.
El parlamentario enfrenta cargos por conspirar para cometer un crimen, fraude, abuso de confianza y violación del reglamento del Servicio de Prisiones de Israel. Después de declarar durante varias horas en sede policial, Ghattas quedó arrestado y esta mañana fue trasladado al Juzgado de Paz de Rishon LeTzion, donde la policía solicita la extensión de la orden de prisión preventiva por 6 días más.
Ghattas es el primer legislador arrestado estando en funciones en la historia de Israel. La Policía explicó que la decisión de arrestarlo fue tomada no sólo debido a la gravedad de las acusaciones que pesan en su contra sino también por la sospecha de que podría escapar del país, tal como lo hiciera su primo y ex legislador Azmi Bishara.
Ghattas fue filmado y grabado cuando visitaba a dos presos de seguridad palestinos que cumplen condena de cárcel por el asesinato de un soldado israelí. Dentro de su abrigo llevaba 12 teléfonos celulares,16 tarjetas SIM y dos baterías de teléfono, que entregó a uno de los presos. Al otro le dio unos documentos que, en este momento son investigados por la policía, que ha solicitado una traducción profesional.
Ghattas atacó con dureza al fiscal general, que solicitó que se retirara su inmunidad parlamentaria para poder registrar su vivienda, computadora y otros objetos personales, como así también para el arresto. “Nunca antes un parlamentario había sido arrestado de esta manera”, dijo Ghattas. “Se trata de un arresto vengativo y arbitrario. La Policía, el primer ministro Netanyahu y el ministro de Seguridad Pública, Erdan, querían una fotografía de un parlamentario árabe esposado”.
Durante la declaración indagatoria, Basel Ghattas dijo que había entregado “unos sobres” a los presos que visitaba “por razones humanitarias”, pero que “no sabía qué había adentro”.