AJN.- Israel usó bombas de fósforo de fabricación estadounidense en sus ataques sobre el sur del Líbano, informó este lunes el Washington Post, en base al análisis de las esquirlas encontradas en una aldea del área.
Organizaciones de derechos humanos instaron a investigar el incidente ocurrido en octubre pasado en el que nueve ciudadanos libaneses resultaron heridos, como crimen de guerra.
Un periodista que trabaja para el medio citado norteamericano encontró restos de tres proyectiles de 55 mm, que fueron disparados hacia Dahira, ubicado en la frontera con Israel.
Los residentes señalaron que los proyectiles causaron incendios en cuatro viviendas. Las bombas de fósforo son utilizadas para tapar movimiento de tropas militares y el material que contienen puede pegarse a la piel y causar quemaduras mortales y daños en las vías respiratorias.
El ataque descrito en la investigación tuvo lugar el 16 de octubre, aproximadamente una semana después del estallido de la guerra en el sur, que se extendió también a la frontera norte.
Según el informe, las bombas de fósforo fueron lanzadas en horas de oscuridad -cuando no tienen ningún uso práctico- sin que hubiera fuerzas israelíes al otro lado de la frontera con el Líbano.
Los residentes afirmaron que el uso de las bombas de fósforo tenía como objetivo expulsarlos de la ciudad, uno de los puntos del intercambio de disparos entre las fuerzas de las FDI y Hezbollah, en preparación para futuras incursiones terrestres.
Sin embargo, en respuesta a la investigación el ejército señaló al Washington Post que el uso de bombas de fósforo se hizo con fines militares para cubrir el movimiento de tropas, «de acuerdo con los requisitos del derecho internacional».