Itongadol.- Israel está «en una guerra existencial» que «tiene que ganar», dice el primer ministro Benjamin Netanyahu esta tarde en una ceremonia de graduación de cadetes en la escuela de oficiales de las IDF en el sur de Israel, conocida como Bahad 1.
Netanyahu promete que Israel «golpeará a nuestros enemigos hasta la victoria total», una frase que ha utilizado repetidamente en los últimos meses de guerra contra Hamás.
Promete eliminar el «régimen asesino de Hamás, eliminar a los terroristas, destruir los túneles» y perseguir a los autores del atentado del 7 de octubre haciendo todo lo posible para «localizar a los rehenes».
Las IDF están avanzando de forma impresionante para alcanzar su objetivo de guerra, al tiempo que minimizan las bajas civiles en Gaza, dice Netanyahu, criticando a Hamás por sus tácticas de utilizar a «civiles gazatíes como escudos humanos, y usar «túneles subterráneos de muchos kilómetros de extensión.»
Las IDF «seguirán actuando contra Hamás en todos los rincones de Gaza, incluso en Rafah, el último bastión de Hamás», promete el premier, entre aplausos.
«Quien nos diga que no operemos en Rafah nos está diciendo que perdamos la guerra y eso no ocurrirá», afirma.
«Nuestros enemigos se han buscado [la destrucción]. El que hablaba de telarañas está viendo leones», en referencia al líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, que calificó a Israel de «frágil telaraña» tras la masacre de Hamás del 7 de octubre.
Netanyahu señala la creciente presión internacional sobre Israel para que ponga fin a la guerra y afirma que Israel resistirá estas presiones ya que su objetivo es la «victoria total en la guerra».
Los líderes occidentales deben comprender que «cuando derrotamos a los asesinos del 7 de octubre, evitamos el próximo 11 de septiembre», afirma. «Por eso deben apoyar a Israel y a las IDF», añade.
«Nos mantendremos todos juntos, corazón con corazón, [y] recordaremos a nuestros caídos y aseguraremos… la victoria», dice Netanyahu.