Itongadol/Agencia AJN.- El primer ministro Benjamín Netanyahu planea realizar una segunda reunión hoy con los líderes de su coalición de gobierno para ganar apoyo y retrasar temporalmente el plan de reforma judicial, luego de que la primera reunión supuestamente se convirtiera en una pelea a gritos entre el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, y el primer ministro.
Netanyahu ahora está buscando asegurar el apoyo de sus aliados de la coalición para retrasar la reforma judicial por varias semanas, según informaron medios israelíes.
El primer ministro tenía previsto dar un discurso público esta mañana anunciando que congelaría la reforma judicial, tras la destitución del ministro de Defensa, Yoav Gallant, y las manifestaciones masivas que surgieron posteriormente en todo el país el domingo por la noche.
Pero Netanyahu más tarde decidió posponer la realización de una declaración pública después de que el Partido Sionista Religioso emitiera una declaración exigiendo la aprobación inmediata de una legislación que altere el comité de nombramientos judiciales.
El proyecto de ley fue aprobado por el Comité de Constitución, Ley y Justicia de la Knesset (Parlamento) el lunes por la mañana, allanando el camino para la segunda y tercera lectura en el pleno de la Knesset.
Durante la reunión de la Coalición, el ministro de Justicia Yariv Levin (partido Likud), el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich (partido Sionista Religioso) y el Ministro de Seguridad Nacional Itamar Ben-Gvir (Otzma Yehudit) exigieron que el gobierno avance con la reforma judicial.
Sin embargo, al final de la reunión, Netanyahu enfatizó que dada la intensidad de las protestas actuales, el gobierno no tiene más remedio que detener las reformas.
El ministro de Justicia, Yariv Levin, accedió silenciosamente a la demanda de Netanyahu de retrasar la aprobación de las reformas varias semanas y dijo a sus asociados cercanos: “Entiendo que no tenemos más remedio que retrasar la continuación de la legislación”.
En un comunicado emitido a la prensa, Levin dijo que aceptaría “cualquier decisión que tome el primer ministro Netanyahu con respecto a la aprobación de la reforma judicial”.
“Todos debemos hacer un esfuerzo para estabilizar el gobierno y la coalición. Todos estamos obligados a no cometer el error que condujo al derrocamiento del gobierno de Shamir, un error que condujo al desastre de los Acuerdos de Oslo”.
Según la radiodifusora pública israelí Kan, el presidente de Otzma Yehudit, el ministro Ben-Gvir, amenazó durante la reunión de la coalición con sacar a su partido del gobierno.
El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, también acordó retrasar la legislación varias semanas, según Kan.