AJN/Itongadol.- El rehén israelí liberado del cautiverio de la organización terrorista Hamás en la Franja de Gaza Itay Regev dijo que fue retenido en condiciones «horribles» por captores «muy, muy crueles» y que no creía alguna vez salir con vida.
Al visitar Londres para defender a los rehenes restantes, incluido su amigo cercano Omer Shem Tov, Regev dijo a la BBC en una entrevista que está allí para “gritar sus gritos desde Gaza” y exigir que la comunidad internacional haga más para liberar a los 130 rehenes que aún están capturados.
“Cinco meses sin ver la luz del sol y sin saber qué está pasando con tu familia, cinco meses estando en condiciones horribles y con hambre”, dijo. “Hay que sacarlos de allí lo antes posible. Tienen la horrible sensación de no saber cuál será su destino de un segundo a otro”.
Regev fue liberado durante una tregua a finales de noviembre.
Describió haber tenido “mucha, mucha hambre” durante su cautiverio y creer que iba a morir. “No me duché durante 54 días. Mis captores fueron muy, muy crueles. No les importó. Tenía heridas en las piernas, grandes agujeros en las piernas… Vivís allí con una sensación de miedo horrible. Cada segundo que vivís con ese sentimiento es un sentimiento terrible, que no sabés realmente si vas a despertar por la mañana”.
Dijo que le dispararon durante su secuestro y luego lo llevaron a un hospital donde un médico, junto con varios terroristas de Hamás, le extrajeron la bala de la pierna sin anestesia ni analgésicos.
“Me pusieron las pinzas en la pierna y sacaron la bala sin anestesia. Me dijeron que me callara porque si no me callaba me mataban. En todo ese tiempo hubo más abusos, bofetadas, escupitajos”.