Itongadol.- El viaje de senderismo anual de Ort Tivon incluyó a tres excursionistas que usan sillas de ruedas para moverse. La discapacidad de Yaella Shimonov proviene de la poliomielitis infantil que la obliga a caminar con brazaletes. Arnon Amit perdió la sensibilidad en las piernas después de un accidente automovilístico durante un descanso del servicio militar activo en Shaldag, una unidad de élite de las fuerzas especiales de la Fuerza Aérea Israelí (IAF). Sarit Rosen, profesora de informática en Ort Tivon, que veía a sus alumnos por primera vez desde el comienzo de la pandemia de COVID. A Rosen le habían diagnosticado ELA, la enfermedad que provoca la pérdida del control muscular.
Pero no tendrán problemas para unirse a otros en este viaje por el desierto, gracias a una empresa emergente israelí llamada Paratrek . La compañía ha desarrollado una silla de ruedas todoterreno especial que puede conquistar terrenos difíciles.
“Creamos Paratrek para hacer que el senderismo sea accesible para todos”, dice Omer Zur, fundador y director ejecutivo de la empresa. El padre de Zur había sido alcanzado por un misil egipcio durante la guerra de Yom Kippur que lo dejó paralizado del pecho para abajo. Años más tarde, todavía podía ir de excursión con su hijo.
“Nunca tuvo la oportunidad de ir a su viaje posterior al ejército, así que 35 años después, decidí llevarlo”, explica Zur. Los dos se unieron a 34 amigos para caminar 509 kilómetros a través de Turquía, gracias a la innovadora silla de ruedas Trekker de Zur.
El soporte delantero y trasero del Trekker permite a los acompañantes estabilizar y levantar a los excursionistas con discapacidades durante un viaje.
Además de brindarles a los excursionistas con discapacidades la oportunidad de experimentar viajes activos con sus compañeros, las escuelas secundarias como Ort Tivon se asocian con Paratrek para agregar segmentos educativos de formación de equipos a sus caminatas. Para los estudiantes, una caminata escolar anual puede convertirse en una comprensión más profunda de lo que significa navegar por el mundo desde una silla de ruedas. Cada 15 a 20 minutos, la caminata se detiene y los excursionistas comparten sus historias.
Me uní a los estudiantes y maestros en esta caminata en particular y observé con asombro cómo manejaban el viaje con relativa facilidad.
“Los estudiantes aprenden que no necesitan huir de las personas que no son como ellos”, dice Shimonov durante la caminata, “Todos vivimos la misma vida”.
A medida que avanzaba la caminata, grupos de dos o tres estudiantes se turnaban para maniobrar a Shimonov, Amit y Rosen por el terreno rocoso. En algunos puntos, los estudiantes empujaron a los excursionistas de veinte a treinta metros por una pendiente más pronunciada . A ellos se unieron miembros del equipo de Paratrek, que supervisaron el viaje, pero no necesitaban ayudar mucho, ya que solo se necesitaban unos pocos estudiantes, incluso cuando el sendero tenía una caída vertical de cinco metros que requería que los excursionistas usaran escaleras.