Nota original: Ketty Dor. Traducción y adaptación al español: Fernando Olschansky
Itongadol.- El mes pasado, más precisamente el 19 de diciembre de 2020, comenzaba en Israel la campaña masiva de vacunación contra el coronavirus. Fue un sábado a la noche en que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, recibia la primera dosis en el país y expresaba en esa oportunidad: “Una pequeña inyección a una persona y un gran paso para la salud”. Desde ese entonces 2.2 millones de israelíes recibieron la primera dosis y 422 mil ambas. La operación avanzó rápidamente. Los israelíes acudieron prácticamente en masa y en pocos días ese país pasó a ocupar el primer puesto en tasa de vacunados en relación a la población.
Una semana después de iniciada la campaña masiva de inoculación el país ingresó en su tercer confinamiento en un esfuerzo por frenar el avance de la pandemia que se vio fortalecida con la llegada de la mutación británica a su territorio. El sistema educativo siguió funcionando y los esfuerzos por hacer cumplir las restricciones no dieron sus frutos. El 8 de enero, el confinamiento se vio reforzado, y en un principio se había acordado que sería por dos semanas.
En el día de ayer se informó de 10.022 nuevos casos de Covid19, esto previo a una reunión de Gabinete para decidir si extender el cierre, el cual finalmente se decidió prolongarlo por otros diez días más ¿Por qué si en Israel hay cierre y se aplicó, por ejemplo el lunes, 186 mil inyecciones, y está encabezando la lista de países que más inocula a su población no logra contener el avance de la pandemia?
El ritmo de las vacunas
La primera dosis de la vacuna ofrece una protección parcial y su efecto puede desaparecer al poco tiempo. La segunda inyección de la fórmula, que es dada 21 días después, fortalece la memoria del sistema inmunológico y la hace durar más tiempo.
En otras palabras, si bien la inoculación comienza a hacer efecto en la primera inyección, solo después de la segunda dosis la eficacia llega al 95%.
En diálogo con la radio estatal israelí (KAN), la directora de Servicios de Salud Pública, Sharon Alroy Preis, expresó que “el 4% de la población no acude a recibir la segunda dosis”. Según estimó, esto es al parecer por “gente que se asusta por publicaciones no basadas en datos, declaraciones irresponsables en los medios sobre las vacunas y efectos adversos”.
Propagación de mutaciones del virus
La misma noche que se inició la campaña masiva de vacunación en Israel se informó también en Gran Bretaña el descubrimiento de una variación del virus, es decir que el mismo atravesó cambios en su secuencia genética.
Con el comienzo de la campaña se había declarado la obligación de cumplir aislamiento a quienes regresaban del Reino Unido por temor a un brote de esta mutación en Israel. Pero pasados los diez días se decidió dar marcha atrás con la medida. Paralelamente, se descubría otra variante en Sudáfrica.
Pasadas tres semanas se informó de 150 casos de mutación británica en Israel. También se conoció de 220 israelíes que habían contraído coronavirus en la versión sudafricana, 15 de ellos habían regresado de viaje, el resto lo portaban por haber sido contactos estrechos.
En el día de ayer la directora de servicios de Salud Pública contó el caso de un israelí que regresó de Gran Bretaña, portador del coronavirus con la variante nueva y contagió a entre 20 y 30 personas, a raíz de la cadena de contagios se llegó a un total de 700 nuevas infecciones.
Foto: Miriam Alster/FLASH90
Cielos abiertos
El 14 de octubre se reabrió el Aeropuerto Internacional de Israel David Ben Gurion. Desde entonces, los israelíes que regresaban de países considerados “rojos”, es decir con alta morbilidad, no cumplieron cuarentena, contrariando las normativas en caso de haber regresado de países “rojos”.
En las últimas semanas se informó de israelíes que regresaron al país desde Dubai y que posteriormente fueron detectados como positivos. Aun así, pese al pedido del Ministerio de Salud de designar a ese país como “rojo” por sus altas tasas de morbilidad, prevalecieron los intereses políticos, estratégicos y además por temor a una crisis con los Emiratos Árabes Unidos se ignoró el pedido de Sanidad, De esta manera, la llegadas de casos de Covid19 continuó su flujo.
Solo el día de ayer se autorizó en Israel que todo ciudadano que solicite ingresar al territorio debe realizar un test por coronavirus, dentro de las 72 horas antes del vuelo.
¿Cierre o “cierre”?
Cuando el tercer confinamiento entró en vigencia, el sistema educativo continuó sus funciones. En el transporte público se vio menos afluencia de personas. Jefes de autoridades locales indicaron que no iban a aplicar multas a negocios que ofrecieran servicio de take and way
Desde el endurecimiento del cierre y pese a los mayores controles avenidas y rutas, durante las horas pico de los días se semana los puestos de control desaparecen y son policías en moto o patrulleros los que realizan dicha labor.
La Policía refuerza los controles principalmente los fines de semana en ciudades y rutas interurbanas.
En el primer fin de semana del endurecimiento del confinamiento, la Policía entregó 9.178 multas por incumplimiento de las normativas.
Paralelamente la Policía allanó yeshivot (seminarios religiosos), Btaei Midrash y salones de fiestas en localidades ultraortodoxas donde se llevaron a cabo eventos multitudinarios en violación de las regulaciones de cierre.
Estos días el noticiero de la televisión estatal que, pese a las altas tasas de morbilidad, los controles policiales en barrios ultraortodoxos es relativamente más baja que en otras partes del país, y a contraposición, es más estricto en localidades árabes.