Itongadol/Agencia AJN.- Un destacado experto en salud afirmó hoy que un factor clave para medir el alcance de la propagación del coronavirus sugiere que la actual ola en Israel está en retroceso.
El número de reproducción básico, o número R, mide la cantidad de casos nuevos que resultan de cada infección. Cualquier número superior a 1 indica que las infecciones están aumentando, mientras que una cifra por debajo indica que un brote está disminuyendo.
Según Eran Segal, biólogo computacional del Instituto de Ciencia Weizmann y uno de los principales asesores del gabinete de coronavirus del gobierno, el número R actual de Israel es 0,95.
La última vez que el Ministerio de Salud informó un número de reproducción básico por debajo de 1 fue a principios de junio, antes de que comenzaran a surgir nuevos casos diarios.
“El descenso no se debe a un menor número de pruebas. La cantidad de pruebas en los últimos dos días es similar a la de hace una semana”, escribió Segal en Twitter, refiriéndose a la posibilidad de que las pruebas hayan disminuido debido al Año Nuevo judío, que comenzó el lunes por la noche y termina el miércoles al anochecer.
Dijo que también hubo una caída en la tasa de pruebas positivas y el número de pacientes con COVID-19 hospitalizados en estado grave, una métrica clave utilizada por el gobierno en la ola actual.
No hubo confirmación oficial del Ministerio de Salud, aunque el twit de Segal fue compartido por el ministro de Salud, Nitzan Horowitz. El panel de control de coronavirus en línea del ministerio, actualizado por última vez el domingo por la noche, muestra un número de reproducción básico de 1.05.
También el miércoles, hubo largas colas en las estaciones de prueba de coronavirus en todo el país, y los medios hebreos informaron que los israelíes estaban sentados en sus autos durante horas mientras esperaban ser evaluados.
El sitio de noticias Ynet señaló que la mayoría de los autos llevaban niños pequeños, y que los menores de 12 años todavía no pueden ser vacunados y, por lo tanto, debían presentar una prueba de coronavirus negativa para ingresar a lugares que operan bajo las reglas del Pase Verde.
El año pasado, los israelíes celebraron Rosh Hashaná bajo una estricta cuarentena, pero el gobierno actual se ha resistido a volver a imponer restricciones radicales para contener la última ola, confiando en cambio en las vacunas, según publicó Times of Israel.