AJN/Itongadol.- Dos de las cuatro víctimas israelíes del ataque con disparos de dos terroristas en una estación de servicio en las afueras del pueblo de Eli, en la Margen Occidental, el martes por la tarde fueron identificadas como Elisha Antman, residente de Eli, y Harel Masoud, de Yad Binyamin.
Uno de los cuatro heridos, un hombre de 20 años, fue trasladado al Centro Médico Shaare Zedek en Jerusalem. Se encuentra en estado grave pero estable con una herida de bala en la parte superior del cuerpo y pronto se someterá a una cirugía, según el hospital.
Dos heridos adicionales están en condición moderada y otro en condición leve, según el MDA. Fueron transportados al Centro Médico Rabin-Hospital Beilinson en Petah Tikva.
De la investigación preliminar de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se desprende que el palestino llegó con su vehículo y un acompañante al ingreso del asentamiento, disparó contra el guardia y luego continuaron rumbo al restaurante ubicado en la estación de servicio contigua y abrieron fuego contra los presentes.
Un ciudadano israelí armado que se encontraba en el lugar repelió la agresión con disparos de arma de fuego neutralizando a uno de los atacantes. El acompañante logró escapar y fue posteriormente ultimado por las fuerzas de seguridad.
Los residentes de Eli permanecen en sus hogares, siguiendo instrucciones de las fuerzas de seguridad.
El jefe de los portavoces de las FDI, Gral. Daniel Hagari, declaró que los informes de inteligencia iniciales apuntaban a una gran probabilidad de que los terroristas estuvieran asociados con Hamas. Un funcionario de Hamas dijo a Al-Jazeera poco tiempo después que los dos hombres eran parte de su ala militar.
Hagari también dijo que las FDI y la policía de Israel han aumentado su presencia en el área para brindar seguridad a los civiles.
El terrorista que murió en el lugar fue identificado como Muhannad Shahada, residente de la aldea de Ourif, cerca de Nablus, según informes palestinos citados por la Radio del Ejército.
El primer ministro Benjamin Netanyahu advirtió que “todas las opciones están abiertas” tras el ataque. “Seguiremos luchando contra el terrorismo con toda la fuerza y lo venceremos”, afirmó.
Israel “demostró en los últimos meses que se las hacemos pagar a todos los asesinos, sin excepción. Cualquiera que nos haga daño está en una tumba o en una prisión. Eso también sucederá aquí”.
«Los colonos se han convertido en patos en un campo de tiro», dijo el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, en el lugar del ataque en Eli.