Inicio ANTISEMITISMO El INADI, una institución nacida como un lugar de convivencia en respuesta al terrorismo

El INADI, una institución nacida como un lugar de convivencia en respuesta al terrorismo

Por IG
0 Comentarios

AJN/Itongadol.- El Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI), cuyo cierre acaba de confirmar el vocero presidencial, Manuel Adorni, es un organismo del Estado argentino creado a instancias de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), entre otras instituciones, el 5 de julio de 1995, luego de los atentados a la Embajada de Israel y la AMIA, que el 17 de marzo de 1992 y el 18 de julio de 1994, respectivamente, provocaron más de un centenar de muertos y varios más de heridos.

En rigor, fue el último eslabón de una cadena iniciada siete años antes, cuando el 4 de agosto de 1988 se promulgó la Ley Antidiscriminatoria 23.592, durante la presidencia de Raúl Alfonsín. La misma fue redactada por el entonces senador Fernando de la Rúa, también a instancias de la DAIA.

Los mencionados atentados avivaron sentimientos negativos y una forma de responder al terrorismo fue con el advenimiento, en el gobierno de Carlos Menem, de un lugar de convivencia, el INADI, que por ley cuenta con un presidente (aunque casi siempre estuvo intervenido), un vice, un Directorio, integrado por la DAIA, la FEARAB, la APDH y un representante con rango de subsecretario de los ministerios de Educación, Interior, Relaciones Exteriores y Justicia, y un Consejo Asesor de 10 organizaciones de la sociedad civil.

No obstante, varias veces fue ganado por la ideología de sus conductores, que lo tiñeron de un aditamento ajeno a sus nobles fines.

Así, hubo presidentes e interventores que dejaron su huella y cuya tarea fue reconocida por la DAIA y la comunidad judía en general, como Víctor Ramos (1995-2000), secundado por la fallecida directora de la Fundación Memoria de la Shoá, Graciela Jinich; Eugenio Zaffaroni (2000-2002); Enrique Oteiza (2002-2006); Pedro Mouratian (2011-2015) o Claudio Presman (2017-2019), y otros que también la dejaron, pero en el sentido contrario y tuvieron numerosos cruces con la dirigencia comunitaria por su ideologización del organismo, como María José Lubertino (2006-2009) y Victoria Donda (2019-2022).

Fundamentalmente tuvieron que ver con banalizaciones o menosprecios de conductas antisemitas, ocultar o relativizar su crecimiento y/o negarse a identificar la judeofobia escondida detrás de varias críticas al Estado de Israel, enmascaradas en un supuesto “antisionismo”.

La relación de la DAIA y la comunidad con el INADI se recompuso en la gestión anterior, de Greta Pena (2023), y comenzaba a avanzar con la flamante interventora María de los Ángeles Quiroga, designada el martes.

Más allá de los lineamientos políticos y la relación con sus conductores, desde el INADI, con el impulso o acompañamiento de la DAIA, se implementaron programas contra la discriminación, se implementaron capacitaciones especiales sobre la Shoá a docentes de escuelas primarias y secundarias, se emitieron dictámenes ante denuncias que atañen a su función, se creó una Plataforma por una Internet Libre de Discriminación, se apoyó el Informe sobre Antisemitismo en la Argentina de la entidad judía, se actuó de consuno ante la inflamatoria visita del cantante antisemita Roger Waters, y en algún momento hasta se implementó un minuto de silencio en honor a las víctimas del atentado a la AMIA en todas sus dependencias.

También te puede interesar

Este sitio utiliza cookies para mejorar la experiencia de usuario. Aceptar Ver más