AJN/Itongadol.- La Federación Italiana de Fútbol inició una investigación luego de los cánticos antisemitas de fanáticos de los equipos de fútbol Inter de Milán y Juventus durante el fin de semana.
Fanáticos del Inter de Milán fueron mostrados en video cantando «los campeones de Italia son judíos» en el estadio antes de que comenzara el juego, llamando «judíos» a sus rivales.
La cuenta de Twitter de Milan criticó los cánticos y señaló: «una vergüenza».
Inter de Milán también criticó los cánticos.
«Somos Hermanos del Mundo desde 1908. Es un compromiso que siempre hemos hecho. Está en nuestra historia, es lo que somos», tuiteó Inter de Milán, junto con el hashtag #NoalaDiscriminacion.
Esto tuvo lugar durante el Derby de Milán, también conocido como Derby della Madonnina o Derby di Milano, que es un partido entre Inter de Milán y Milan, los dos equipos de fútbol más importantes de Milán.
En este partido también se produjeron incidentes de violencia, con simpatizantes de Inter de Milán y Milan enfrentándose en el estadio San Siro.
Milan ganó 3-2.
Asimismo, fanáticos del club de fútbol italiano Juventus también participaron en cánticos antisemitas el mismo día, gritando «los Viola no son italianos, son una manada de judíos» durante su partido en el estadio Artemio Franchi de Florencia.
El mundo del fútbol italiano ha estado luchando durante mucho tiempo con el problema del racismo en sus estadios. Los jugadores de color son abucheados continuamente por la afición del equipo rival y a menudo han aparecido pancartas antisemitas en las gradas.
En 2019, ciertos hinchas de Juventus prometieron gritar consignas racistas si no les daban entradas gratis.
Hace un año, el boxeador italiano Michele Broili enfrentaba a Hassan Nourdine, de origen marroquí pero de nacionalidad italiana. Los problemas llegaron cuando Broili se quitó la camiseta para lucir todo un catálogo de tatuajes nazis. Desde el «88» que representa el grito «Heil Hitler», hasta una bandera representativa de las SS’.
La indignación por los tatuajes de Broili provocó que las autoridades deportivas del país se preguntaran cómo la Federación Italiana de Boxeo permitió que un boxeador con tatuajes fascistas y nazis -incluyendo una bandera con los rayos de las SS, la Totenkopf (calavera alemana y huesos cruzados) y el símbolo de la supremacía blanca 88- fuera elegido para el combate por el título que además fue televisado.
Nourdine declaró a la revista italiana La Stampa que se sintió «impactado» cuando entró en el ring y vio los tatuajes de Broili: «Esos tatuajes me parecieron obscenos. No hay justificación», dijo Nourdine. «La Federación Italiana de Boxeo debería haberse dado cuenta desde el principio de que este boxeador tenía esas simpatías. Incitar al odio está penado por la ley».
Según The Guardian, el combate también fue retransmitido en la página web de La Gazzetta dello Sport, la mayor revista deportiva de Italia, y miles de espectadores se molestaron al ver a Broili haciendo lo que parecía un saludo fascista antes del comienzo del primer asalto.
La Federación Italiana de Boxeo emitió un comunicado recordándoles a sus miembros que «deben abstenerse de cualquier comportamiento discriminatorio».
La federación de boxeo también está estudiando la posibilidad de prohibir la entrada de Broili, quien también podría enfrentarse a una investigación penal que podría suponer hasta dos años de cárcel si es declarado culpable de incitación al odio.