Itongadol/AJN.- El primer ministro Benjamín Netanyahu reconoció este lunes que Israel tomó docenas de acciones en los territorios que se extienden más allá de la frontera del norte para prevenir que Hezbollah participe del intercambio de armamento.
Los comentarios de Netanyahu tuvieron lugar durante la visita del mandatario a los Altos del Golán para supervisar las maniobras a gran escala que llevan a cabo los reservistas del Batallón de Paracaidistas en la frontera.
“Estamos orgullosos de que en el volátil y tormentoso Medio Oriente, pudimos mantener una calma relativa y una relativa seguridad en Israel. Actuamos cuando debemos actuar, incluso aquí, cruzando la frontera, en docenas de ataques para prevenir que Hezbollah participe del intercambio de armas", manifestó el premier.
Netanyahu afirmó que Israel se encontraba actuando en otros frentes también, "cerca o lejos, pero de manera inteligente". Señaló que Israel se enfrentaba al Estado Islámico y a Hezbollah en el norte, a Hamas y la yihad islámica en Gaza y al Estado Islámico y yihadistas globales en el Sinaí.
En diálogo con los soldados de reserva, Netanyahu expresó: "Este es nuestro país, y debemos defenderlo; nadie más lo va a defender excepto nosotros. Si algo hemos aprendido es que debemos defendernos nosotros mismos por nuestros propios medios, es por eso que la actividad que está realizando el servicio de reserva acá significa tanto".
A pesar de los esfuerzos, una pieza de armamento avanzado que Israel no pudo bloquear llegó en manos de sus enemigos, se trata del sistema de defensa antimisil S-300, que según los informes, Rusia comenzó a suministrar a Irán.
Este sistema es uno de los más avanzados de su tipo, capaz de anticipar múltiples aeronaves y misiles balísticos en un radio de 150 kilómetros de distancia, lo que podría dificultar los ataques a las instalaciones nucleares de la República Islámica desde el aire.
Israel y los Estados Unidos intentaron evitar la venta de este sistema a Irán durante casi una década.