El Consejo de Estado, la más alta jurisdicción administrativa de Francia, indica que, si pasadas las 48 horas, Eutelsat no retira el canal conflictivo deberá pagar 5.000 euros diarios de multa.
Al Manar despertó las iras francesas. En solo 15 días de funcionamiento legal infrigió todas las leyes que prohíben «propósitos que inciten al odio racial».
La cadena difunde programas que tienen «connotaciones antisemitas». No falta quien opina que Israel contamina voluntariamente con Sida a la población árabe, mientras que, en un espacio de ficción, se pudo ver cómo un rabino reclamaba el degüello de un menor no judío para poder elaborar pan.
Las emisiones del canal de Hezbolá confunden la crítica de la política de Israel con el rechazo al judaísmo. Hacen apología de la violencia contra los habitantes de Israel y presentan, como dignos de imitación, los casos de terrorismo suicida.
Al Manar se emite desde territorio libanés.
La cadena se puede captar en Europa a través de otras dos ofertas vía satélite, la propia de Arabsat y la de Newskies.
FTe Cidipal