Las conversaciones para la participación de los laboristas en el gobierno de Ariel Sharon entraron el crisis, después de un desacuerdo sobre el presupuesto del Estado, se supo el martes de fuentes de esta formación.
La delegación laborista suspendió las conversaciones acusando al Likud, el partido del primer ministro, de rechazar toda concesión en el plano social, en lo relativo en particular a las ayudas para los jubilados. También aparecieron divergencias en el reparto de las carteras ministeriales, si bien los laboristas renunciaron desde un principio a los cargos claves.
Por otra parte, el ejército israelí destruyó el martes al amanecer 10 casas palestinas, en un incursión en el campamento de refugiaados de Jan Yunes, en la Franja de Gaza, informaron fuentes de la Agencia de la ONU de Ayuda a los Refugiados Palestinos (Unrwa). Una unidad blindada, acompañada de bulldozers, penetró en el campamento y destruyó las viviendas tras haber hecho salir a los habitantes, tras lo cual se retiró, indicaron.
Un portavoz militar israelí confirmó que una unidad «había destruido casas desde las que los palestinos disparaban con morteros u otras armas». Según el portavoz, 300 obuses de mortero fueron disparados en ese sector desde el mes de noviembe contra las colonias judías o las posiciones del ejército hebreo.