Itongadol/AJN.- Trabajadores del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel cerrarán todas las embajadas, consulados y delegaciones de todo el mundo debido a la disputa laboral. El ministro Lieberman criticó la decisión.
El Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Relaciones Exteriores israelí llamó hoy a una huelga general como parte de un conflicto laboral en curso. Las 103 embajadas de Israel, consulados y delegaciones diplomáticas de todo el mundo estarán cerradas, incluso la sede del ministerio en Jerusalem.
El sindicato de los trabajadores añadió que el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Avigdor Lieberman, no será capaz de entrar a su oficina.
Los empleados del Ministerio de Relaciones Exteriores se comprometieron en una lucha por mejorar de sus condiciones de trabajo hace más de un año, y criticaron al Ministerio de Hacienda porque aseguran que se niega a reconocer los derechos de los diplomáticos y a mejorar sus salarios.
Además de aumentar la presión sobre el Ministerio de Finanzas, el sindicato de trabajadores decidió intensificar su lucha y ha instruido a los empleados del ministerio a abandonar sus lugares de trabajo y anunciar una huelga general la tarde del domingo.
Los trabajadores cerrarán todo el Ministerio de Relaciones Exteriores, así como las misiones y embajadas en todo el mundo, por primera vez desde el establecimiento del Estado de Israel en una huelga indefinida que podría paralizar los servicios diplomáticos de Israel.
Después de un proceso de mediación de siete meses con el Ministerio de Finanzas que falló, los trabajadores del Ministerio de Relaciones Exteriores decidieron continuar su protestar contra lo que consideran una serie de fallas en sus condiciones de empleo, incluidos los salarios bajos, los cuales según ellos son incluso más bajos que lo que es informado, así como los beneficios y planes de pensiones inadecuadas.
La lista de quejas también incluye el hecho de que los salarios de los diplomáticos no han sido actualizados por la inflación en 10 años, y el costo de vida en los diferentes países es mayor que sus magros salarios.
Lieberman criticó la huelga sin precedentes con el argumento de que perjudica al Estado: "Es una decisión lamentable que apunta a la pérdida de control. No tiene ningún beneficio y sólo causa más daño a los trabajadores del ministerio”.