«Nuestras operaciones selectivas contra los líderes de Hamas continuarán», declaró esta fuente que pidió el anonimato. «Ninguna barrera geográfica podrá detener la persecución de los terroristas y sus jefes», añadió.
Israel ha acusado al Gobierno sirio de estar detrás del ataque. Según esta fuente, el atentado, que provocó 16 muertos además de sus dos autores, lleva la huella de los jefes de Hamas, cuya dirección política se encuentra en Damasco. «Las órdenes vienen de Damasco», afirmó.
Por otra parte, el portavoz de la presidencia del Consejo en Jerusalén, Raanan Gissin, ha declarado que Israel va a acelerar la construcción de la línea de seguridad en Cisjordania tras el ataque.
«Ahora vamos a acelerar la construcción de la valla en este sector», afirmó Gissin, en referencia a la región de Hebrón de donde partieron los dos autores de los atentados.
Tras las dos explosiones registradas en sendos autobuses urbanos en Beersheva, el Ejército israelí ha cercado la ciudad cisjordana de Hebrón, de donde partieron los atacantes palestinos y ha destruido la vivienda de uno de ellos.
El Ejército israelí arrestó en las últimas horas a 19 palestinos, 12 de ellos en Hebrón, mientras que el resto fueron detenidos en los distritos de Belén y Naplusa.
Por su parte, residentes palestinos temen al mismo tiempo que aumenten las operaciones de «asesinatos selectivos», llevadas a cabo por Israel contra dirigentes y militantes del alzamiento armado.
Según las investigaciones preliminares, los dos atacantes suicidas Ahmed Kawasme y Nisim Jabri se conocían desde hacía años y planearon hacer estallar sus cargas casi de forma simultánea cuando los autobuses en los que se encontraban se hallaban apenas a 100 metros de distancia.
Fte El Mundo