Palestinos marcharon hoy jueves de la aldea cisjordana de Bituniya a la prisión de Ofer para protestar contra la detención administrativa de los cuatro palestinos que están en huelga de hambre.
Varios cientos de manifestantes que agitaban banderas de Fatah comenzaron a avanzar hacia el puesto de control Bituniya, dado que la prisión de Ofer se encuentra más allá de ese punto.
Un periodista israelí sufrió heridas leves en la cabeza cuando los jóvenes palestinos se enfrentaron con fuerzas de seguridad. Las fuerzas de seguridad apelaron a métodos antimotines para controlar los disturbios.
Dos de los presos en huelga de hambre, Samer Issawi y Sharawneh Ayman, se encuentran entre 14 palestinos que fueron liberados en 2011 a cambio del soldado Gilad Shalit, el soldado israelí que fue secuestrado en la frontera de Gaza por Hamas, el grupo islamista terrorista que ahora gobierna el enclave.
Los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los palestinos que exigen la liberación de los detenidos tienen lugar casi a diario. La manifestación más violenta tuvo lugar el pasado viernes en Bituniya.
El legislador palestino Mustafa Barghouti, uno de los líderes de las protestas, dijo al portal de noticias Ynet que "la atmósfera en la Ribera Occidental es aún más tensa" que durante la campaña del año pasado para reclamar la liberación de Adnan Jader, quien se negó a comer por 66 días en protesta por su detención administrativa en Israel.
Jader fue puesto en libertad en abril pasado como parte de un acuerdo entre sus abogados y la fiscalía del Estado y debido a la creciente presión pública palestina.
"Las protestas del viernes fueron similares a las protestas celebradas durante la primera Intifada. Si algo malo le sucede a Issawi, predigo que toda Cisjordania se levantará y una nueva intifada no violenta va a estallar", advirtió Barghouti.
Adnan lanzó su propia huelga de hambre hace unos días en la sede de la Cruz Roja en Ramallah en solidaridad con los detenidos. Dijo que quiere transmitir un mensaje a la comunidad internacional en protesta por su silencio frente a la huelga de hambre de los presos.
En tanto, el jefe de Hamas, Khaled Mashaal, llamó a la familia Sharawneh esta semana y prometió que el asunto se resolverá en los próximos días.
El padre de Issawi le dijo a Ynet que a pesar de la creciente presión internacional no es optimista en cuanto a las posibilidades de la liberación de su hijo.
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