“El mensaje del Rebe es que todo chico iehudí tiene que recibir jinuj -educación- de Torá sin excepción, y todos los esfuerzos son justificables” con ese fin, explicó el rabino Tzví Grünblatt, director general de Jabad Lubavitch de Argentina, a la Agencia Judía de Noticias (AJN) el importantísimo esfuerzo que se destina a la educación judía en toda la comunidad, parte de los cuales es la refacción de la planta baja y el primer piso del edificio del ex colegio “Dr. Herzl”, de Tucumán 3177, para que allí funcione el gan de las Escuelas Oholey Jinuj, cuya inauguración se realizó en la noche de ayer, miércoles.
Luego de que los más de un centenar de asistentes disfrutaran de un importante cóctel, el administrador de Oholey Jinuj, Gabriel Pines, efectuó un lejaim con motivo de la inauguración de las nuevas instalaciones e invitó a ver un video institucional que mostraba el desastroso estado en que se encontraba el edifico cuando Jabad Lubavitch lo adquirió, hace algo más de cinco años, y cómo ha quedado luego de las refacciones efectuadas.
En el mismo, la directora general del gan, Shterna Grünblatt y varias coordinadoras y morot explicaban la tarea educativa que se brinda a más de 220 chicos en las 17 salas que están funcionando en la actualidad.
Luego, Ruth Pipkin, quien fuera morá durante 25 años y luego directora durante una década de la escuela Herzl, rememoró la importante actividad que allí se llevaba a cabo, con unos mil alumnos entre el jardín de infantes, la primaria y la secundaria.
“Con los esfuerzos mancomunados de todos los que hoy están acá llegamos a la presente reapertura; estamos en buenas manos, otra vez la escuela tiene dirigentes, rabinos, docentes y familias judías que sólo quieren que las futuras generaciones continúen con el proyecto escolar”, agregó.
A continuación, un visiblemente emocionado Javier Stolovitsky, ex alumno del Herzl hasta culminar el secundario y uno de los askanim que tuvo destacada actuación para que Jabad Lubavitch adquiriera el predio y colabora activamente con Oholey Jinuj, contó como se involucró en este proyecto.
El presidente de la AMIA, Guillermo Borger, agradeció a D’s el “llegar a este momento en que una escuela judía se reabre con contenido” y deseó “que tenga más éxito” ese “lugar de Torá donde nuestros chicos van a aprender el verdadero hemshej (continuidad) de la iahadut (judaísmo), para que se reproduzca y multiplique”.
Luego, el también ex alumno de Herzl -al igual que su esposa, Ite- le entregó a Grünblatt una plaqueta con motivo de la reinauguración del gan, ante la mirada del vicepresidente 1º de la AMIA, Ángel Barman.
Por su parte, el director general de Jabad Lubavitch de Argentina aclaró que se estaba festejando sólo “un inicio” porque “el sueño es llegar a lo que se estuvo planificando: construir acá 18.000 metros cuadrados” porque la idea es que el edificio sea sede de “jardín, primario, secundario, terciario, donde se alimenten y se nutran educadores”.
“Entendemos que faltan educadores judíos en la Argentina” porque hubo “una época en que existía más oferta que demanda”, mientras que “hoy hay mucha más demanda que oferta y hay necesidad de buenas educadoras”, ya que “gracias a D’s, todos los días se abren nuevas escuelas o grados, y por eso sentimos la necesidad de alimentar el mercado de educadoras en el espíritu de Jabad”, anticipó.
“También es nuestra idea hacer un dormitorio para chicas que vengan del Interior, Sudamérica y el mundo entero” porque a “una chica en edad de secundario que quiere recibir educación judía y de Torá se le hace muy difícil”, a diferencia de los varones, que pueden vivir en las ieshivot, prosiguió Grünblatt, quien luego alabó y pidió bendiciones para el personal docente y administrativo de las Escuelas Oholey Jinuj.
10/09/2024