Mientras que el primer ministro libanés se encuentra con Erdogan en Turquía, la oposición dice que le permitirá dirigir el gobierno hasta el 2013 si termina con la “difamación que se inventó” con la investigación del tribunal internacional sobre el asesinato de su padre. Luego de haberse encontrado con el presidente Barak Obama en Washington, Hariri viaja a Turquía para resolver la crisis del gobierno con el primer ministro turco.
Luego de la renuncia dramática de los ministros de Hezbollah y sus aliados del gobierno libanés, la oposición libanesa le dio hoy un ultimátum al primer ministro Saad Hariri.
El periódico con base en Beirut al-Akhbar nombró a un alto funcionario de la oposición, quien dijo que Hariri podría quedarse en la oficina si accediera a la demanda de Hezbollah y dejase de cooperar con el tribunal de las Naciones Unidas que investiga el asesinato de su padre, el ex primer ministro libanés Rafik Hariri.
El comité internacional, que se espera que entregue sus conclusiones en un futuro cercano, probablemente apunte el dedo a la organización Hezbollah y presente acusaciones contra sus miembros.
En un intento por aumentar la presión en el primer ministro libanés, la masiva renuncia se llevó a cabo durante el encuentro de Hariri con el presidente estadounidense Barak Obama en Washington.
“No queremos cerrar la puerta completamente”, dijo una fuente de la oposición. “Hariri puede seguir liderando el nuevo gobierno hasta el 2013 pero solo si promete finalizar con la difamación que inventó el tribunal internacional”, agregó.
Mientras tanto, el periódico londinense de lenguaje árabe Al-Hayat nombró a fuentes de la oposición libanesa, que dijeron que el gobierno sirio favorece a personas “neutrales” como el primer ministro del Líbano.
Según el periódico, las fuentes se están refiriendo claramente a Najib Mikati, un ex primer ministro libanés y miembro del partido de Hariri. Al-Hayat dijo que el deseo de Siria de eliminar a Hariri de su posición apunta a crear una nueva realidad política en el Líbano, que estaría cercana a la del liderazgo sirio y el resto de los países árabes.
Hariri consultó hoy con el poder regional Turquía como parte de los esfuerzos de juntar apoyo internacional luego de que Hezbollah derribara al gobierno libanés.
Luego de haberse encontrado con el presidente Barak Obama en Washington y parado en Francia para ir a Turquía, se espera que el líder libanés discuta los pasos para resolver la crisis del gobierno con el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, y el ministro de relaciones exteriores, Ahmet Davutoglu.
Se espera que los líderes turcos propongan una conferencia internacional para hablar sobre la crisis y recomendarle a Hariri que busque consenso con Hezbollah, según dijo la televisión privada NTV hoy.
Turquía, que ha construido un lazo cercano con el Líbano desde que participó en la fuerza para mantener la paz luego de la guerra del 2006 de Hezbollah e Israel en el sudeste libanés, cree que podría jugar un rol en devolverle la estabilidad a la región.