El líder de Hezbollah, Sheikh Hassan Nasrallah, dijo anoche que su grupo militante chiíta estaba preparado para rechazar cualquier ataque israelí futuro, a pesar de la tensión interna del Líbano por el tribunal de la ONU que investiga el asesinato del ex primer ministro libanés, Rafia Hariri, en el 2005.
“La resistencia está trabajando y entrenando día y noche”, dijo Nasrallah.
En su discurso, Nasrallah acusó a Israel de espiar en el Líbano con radares ocultos bajo la tierra, que envían imágenes día y noche.
Sus dichos se hicieron luego de que los expertos militares del Líbano anunciaran el descubrimiento y desmantelamiento de dos cámaras espía posicionadas en las montañas del país.
Según las declaraciones de fuentes militares, Hezbollah les habría informado acerca de los sistemas.
El grupo terrorista, apoyado por Irán y Siria, tiene poder de veto en el gobierno libanés.
Uno de los sistemas de largo alcance estaba en la montaña Sannine, que mira a Beirut y el este del Valle Bekaa, y el segundo en la montaña Barouk, al sudeste de la capital, informó la armada en una declaración.
El sistema encontrado en Sannine incluyó una cámara, un dispositivo que envía imágenes y un tercero que recibe señales, dijo la fuerza militar. El aparato encontrado en Barouk era “mucho más complicado”.
Anoche se escuchó una explosión cerca de la ciudad portuaria de Sidón, al sudeste del Líbano.
Los residentes del área también observaron llamas rojas junto con la explosión, que vino del mar, según informaron una fuente de seguridad local. También agregó que “podría haber sido una mina naval”.
“Se vieron a los helicópteros israelíes sobrevolando el área cuando se llevó a cabo la explosión”, informó la fuente, sin proveer mayor información.
Según los medios locales, un número de buques de guerra israelí fue visto en la costa de Sidon y unos aviones israelíes hicieron estampidos sónicos y lanzaron bengalas.
La Fuerza de Defensa de Israel no informó de ninguna actividad inusual en el área
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