EE.UU. condenó los reclamos de un alto funcionario palestino que dijo que el Muro de los Lamentos del Monte del Templo de Jerusalem no tiene significado para los judíos.
Al-Mutawakil Taha, el ministro diputado de información de la Autoridad Palestina, había dicho el miércoles pasado que el muro, considerado como un sitio sagrado judío, era parte de un lugar religioso islámico y que solo la “tolerancia musulmana” le permitía a los judíos rezar ahí.
Sus dichos elevaron rápidamente el enojo de Israel que se repitió en EE.UU.
“Condenamos fuertemente estos comentarios y los rechazamos completamente como incorrectos, insensibles y altamente provocativos”, expresó un vocero del Departamento de Estado americano.
“Hemos hablado varias veces con los líderes de la Autoridad Palestina acerca de la necesidad consistente de combatir todas las formas de deslegitimación de Israel, incluyendo la negación de conexiones históricas judías con la tierra”, agregó.
El jefe del Comité de Asuntos Externos americano, el representante Howard Berman, también se lanzó contra los comentarios y dijo que eran “provocativos e incitadores”.
“Condeno fuertemente los dichos de que el Muro de los Lamentos en la Ciudad Vieja de Jerusalem no tienen significado religioso para los judíos”, dijo Berman.
“El presidente palestino, Mahmoud Abbas, y el primer ministro Fayyad saben de la importancia espiritual del Kotel a la comunidad judía global”, expresó. También le pidió a Abbas que denunciara el informe Taha y clarificara que los dichos no se hicieron desde una posición oficial de la Autoridad Palestina.
El Muro de los Lamentos forma un lado de un montón de tierra en el que se paraba el templo judío antes de ser destruido por los romanos en el 70 AEC (antes de la era común). El montículo, conocido por los musulmanes como Haram as-Sharif o Santuario Noble, alberga la Mezquita al-Aqsa, el tercer lugar sagrado del Islam.
Actualmente, las autoridades musulmanas supervisan todo lo que se compone por encima de él, mientras que los israelíes administran el precinto del Muro y las fuerzas de seguridad judías vigilan toda el área.
“Este episodio es otro trágico recordatorio del núcleo del conflicto donde siempre ha estado, básicamente la negativa de reconocer la presencia del pueblo judío en la región”, expresó David Harris, director ejecutivo del AJC (American Jewish Comitee).